Yolanda Charte, limpiadora de hospital: el paño de lágrimas de los pacientes aislados
Cuando Yolanda Charte termina de hablar, sus compañeras rompen a aplaudir. Como si llevasen tiempo deseando ser escuchadas. Su trabajo como limpiadoras de hospital, aunque ... menos reconocido que otros, ha sido «especialmente duro» estos meses: «Hemos tenido más carga de trabajo de lo normal, pero lo hemos hecho por el bienestar de todos». La desinfección resulta fundamental para prevenir contagios, pero ellas, las encargadas de esta tarea, no siempre han estado protegidas: «Incluso la OMS dijo al principio que sólo necesitábamos mascarillas quirúrgicas, pero ya se ha demostrado que existe transmisión por aerosoles y ahora por suerte llevamos FFP2 (de alta protección)».
Pero no sólo se han limitado a limpiar. También han hecho de paño de lágrimas de los pacientes, aislados, sin visitas: «Nos han impactado muchos casos, sobre todo en cuidados intensivos. Les hemos dado nuestra atención y cariño. Algunos nos han emocionado. Necesitan hablar y se nota, aunque la dedicación de los profesionales sanitarios ha sido increíble». Ahora todo es distinto, menos duro que en la primera ola, cuando «faltaba sitio en todos lados», pero estas trabajadoras siguen necesitando «protección y que nos consideren personal en primera línea».
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