El Hospital Regional consigue curar a su primera paciente con linfoma usando células modificadas genéticamente

Según relatan desde el centro hospitalario, la paciente ingresó en la planta de hematología el 16 de junio y ha recibido el alta hospitalaria menos de un mes después. Presentaba un linfoma diagnosticado en agosto de 2022, que se había mostrado refractaria a dos líneas de tratamiento de quimioterapia, lo cual condiciona un pronóstico desfavorable. «En esta situación la terapia con células T CAR (linfocitos T de la paciente modificados genéticamente), representa una nueva opción de tratamiento que puede revertir esta evolución en un porcentaje significativo de pacientes», recalcan. Así, la paciente inició un tratamiento previo de linfodeplección de 3 días de duración tras el cual recibió el producto con las células CAR-T. En la evolución posterior precisó soporte en UCI durante 3 días de manera protocolizada y volvió a planta de Hematología hasta el día del alta para continuar un seguimiento en el programa de hospitalización domiciliaria HEDO con el que cuenta el hospital.

Desde el Hospital Regional recuerdan que para la aplicación de la terapia CAR-T se requiere la participación de un equipo multidisciplinar en el que intervienen además de hematólogos; farmacéuticos, intensivistas, neurólogos e inmunólogos y profesionales de enfermería. Las células CART-T se reciben criopreservadas en el CTTC (Centro de Transfusión Tejidos y Células de Málaga), donde el equipo de hematólogas junto con farmacia, las recepciona y mantiene criopreservadas hasta su traslado e infusión en el hospital.

«Es una satisfacción que nuestra primera paciente haya sido tratada con éxito y esté ya en casa. Es el inicio de un camino en el que todo el equipo ha puesto mucha ilusión, ya que es una terapia muy esperanzadora para muchos pacientes que de esta manera podemos recuperar. Hasta ahora nuestros pacientes debían trasladarse a Sevilla, al Hospital Virgen del Rocío, para tratarse y aunque la relación entre los dos hospitales ha sido muy buena y eficaz, era un problema para muchos pacientes tener que estar desplazados y no poder recibir el tratamiento en Málaga. De esta manera nuestros pacientes no tendrán que desplazarse y además podremos tratar también a pacientes de Granada y Almería que están más próximos geográficamente», explica el jefe de servicio de Hematología, Manuel Muñoz.

Hace un año, el Sistema Sanitario Público de Andalucía incorporó a los hospitales Regional de Málaga y Reina Sofía para la utilización de los medicamentos CAR-T destinados al tratamiento de linfoma B de células grandes refractario, por un lado; y a leucemia linfoblástica aguda en pacientes pediátricos y adultos jóvenes hasta 25 años. «Próximamente se incorporarán nuevas indicaciones como el linfoma de células del manto, linfoma folicular o mieloma múltiple», avanzan desde el hospital, que señalan que ambos centros se unieron al Hospital Virgen del Rocío, quien ya venía aplicando estas terapias.

En el marco del Plan para el abordaje de las terapias avanzadas en el Sistema Nacional de Salud:, el Ministerio de Sanidad lanzó una convocatoria para que los centros que cumplieran una serie de criterios pudieran ofrecer tratamientos con terapia CAR, que constituyen una alternativa terapéutica de alto impacto en tumores hematológicos adultos y pediátricos. En este sentido, tanto el Hospital Universitario Reina Sofía como el Hospital Universitario Regional de Málaga cumplieron los requisitos para aplicar estos tratamientos tras la evaluación realizada.

Los criterios obligatorios fueron: disponer de una unidad multidisciplinar formada por los roles profesionales que intervienen en el proceso; disponer de un comité clínico patológico multidisciplinar para la revisión de candidatos a medicamentos CAR-T; y disponer de experiencia clínica demostrada. Así, en este último criterio se valora la experiencia clínica con medicamentos CAR-T en los últimos tres años y la actividad total de trasplantes alogénicos de progenitores hematopoyéticos complejos en ese periodo de tiempo.

Células CAR-T

Esta técnica utilizada ahora es una de las estrategias terapéuticas que más éxitos está cosechando en los últimos años para combatir leucemias y linfomas refractarios (aquellos que no responden a ningún tratamiento) es la infusión de células CAR-T. Así se denomina a la modificación genética de las células T (unas células de la sangre involucradas en la defensa contra agentes infecciosos y cáncer) que se hace en el laboratorio y por las que se les inserta un receptor de antígeno quimérico (CAR, por sus siglas en inglés chimeric antigen receptor) con el propósito de que las células T se adhieran a las malignas y las destruyan.