Los disfraces que eligen los malagueños para Halloween

Están los disfraces de siempre y los que apuestan por un toque más original. Desde los típicos fantasmas o brujas hasta los de la moda de los últimos años como La Casa de Papel o Harley Quinn. O los de ultimísima hora que optan por la felpa de diablo o las manchas de sangre en la cara. Pues en Málaga hubo de todo: desde los más currados hasta más improvisados. Algunos como Isabel incluso se atrevieron a reciclar el vestido de novia de su madre... Pasen y vean.

Por calle Larios arrastraba la cola que llevó su madre Mari Carmen el día de su boda. «Tiene ya 40 años este vestido... Cuando le dije a mi madre que lo iba a manchar de sangre...», comentaba Isabel Merino junto a su pareja Juan Rojano y su pequeño Nain. De traje y vestidos para la ocasión de ese día en el que se celebra el amor, aunque en este 31 de octubre el motivo fue mucho más sangriento. Pero no fueron los únicos que eligieron este disfraz para la noche de Halloween, eran muchos novios y novias cadáveres los que causaron terror por la provincia. También la pequeña Andrea, con 8 años, se vistió de novia y llevaba su calabaza para el famoso '¿Truco o trato?'.

El folclore mexicano ya es uno más en las noches de Halloween. Las catrinas son uno de los disfraces más elegidos de cada 31 de octubre: «Siempre voy de catrina, aunque el año que viene creo que vamos a cambiar», admitía Anastasia junto a su hija. Las pedrerías, flores y vestidos hacen de este estilismo uno de los más llamativos: «Llevamos horas y horas pintándonos», admitía una de las hermanas Medina, que no podían evitar que todo el mundo las parase para hacerse una foto con ellas.

¿Quién no ha pensado en vestirse para Halloween con una sábana echada por encima? Un clásico entre los clásicos, el fantasma. Como esos dos jóvenes Rania y Simón, que a sus 12 años corrían cogidos de la mano por el paso de peatones hacia calle Larios. «Hemos visto un disfraz que nos gustaba mucho y queríamos verlo», admitían al terminar el sprint. La elección del fantasma es, sin duda, una de las más elegidas también para los más pequeños, que pasearon por Málaga con el característico «Boo» como frase estrella para asustar.

La máscara de Dalí y el mono rojo es un recurso que sirve para cualquier evento de disfraces. Ya sea Carnaval o Halloween, el disfraz de La Casa de Papel lleva ya unos años fijo entre los más elegidos. «Es la primera vez que nos disfrazamos de esto», admitían Mohamed y Yosira en el Centro de la ciudad mientras se encontraban a un pequeño vestido como ellos y se hacían una foto. Los chicos de La Casa de Papel también cuentan como personajes terroríficos.

Los sombreritos más conocidos de Halloween: los de las brujas. Mágicas, elegantes e inteligentes, así son estas mujeres terroríficas pero dulces a la vez. “No queríamos comernos mucho la cabeza y elegimos ir de brujas y todas de negro”, confesaban el grupo de malagueñas de Carla, Estrella, Lucía, Miriam y Laura. Brujas pequeñas y grandes con la familia de María del Mar y Cristina, dos amigas que eligieron este atuendo para la primera vez que disfrazan en Halloween a sus hijas de 3 años, pero ellas también se unieron: “Venimos disfrazadas por ellas”, confesaban desde la fiesta de Cruz de Humilladero.

Como Leonardo Cañestro, que hasta con las bolsas de la compra se paseaba de calle Larios dirección a plaza de la Marina. Incluso se atrevía a desafiar: al que lo mirase, se acercaba de la forma más sigilosa pero con el toque macabra del personaje del Joker. Este es otro de los clásicos que no falla en Halloween.

Chaqueta azulgrana, dos coletas bien altas y el bate de béisbol. El disfraz de este personaje del universo de DC Comics triunfa de nuevo en la noche del 31 de octubre. Desde las más pequeñas hasta las más grandes, no hay edad para disfrazarse de Harley Quinn. O sino que se lo digan a la pequeña Erica de 9 años, que llevaba ya meses pidiendo tener este disfraz. O a Sara Soler, que a sus 20 años admite que ya se ha disfrazado «muchos años de esto», refiriéndose a esta supervillana.

Loli y Mari Carmen iban con sus amigas en pandilla, pero no una cualquiera, sino una de las más "religiosas". Disfrazadas de monjas, este grupo de amigas se encontraba con otros que iban de la misma temática: Daniel, José Manuel, César, Silvia, Marta... "Nos hemos cruzado las dos congregaciones escapadas", bromeaban estos malagueños. El disfraz de monja también lo llevaba Paula, que con la cruz y el hábito, intentaba asustar a los que se acercaban a ella.

Un toque perfecto para hacer que sea complicado mirar a la cara sin pasar miedo. El malagueño José Carlos se disfraza cada año y este Halloween ha optado por ser el personaje de la niña de The Ring con las lentillas blancas para asustar aún más. "Este es el que más miedo me ha dado hasta ahora", le comentaban al verlo. Otra malagueña, Noemí, optó por ponerse las lentillas rojas para su disfraz de vampiro. Muchos fueron los que apostaron por este complemento para los ojos: miradas terroríficas.

Pocos eran los que pasaban como si nada delante de la familia malagueña que iba disfrazada de la película de Disney 'Coco'. "Quería disfrazar a mi niño de Miguel (Coco) y al final he acabado haciéndolo con todos. Ellos vienen de Córdoba y se han preparado el disfraz para estar todos juntos", comentaba Alba María junto a sus padres, suegros, sobrinas, hermana... Toda la familia haciendo el papel de la familia de Coco. Pasaba eso con ellos, que iban de la misma temática, pero muchos acompañaron a sus hijos con cualquier disfraz.

Los perros ya son como uno más en la familia y en Halloween no iba a ser menos. El grupo 'Perripandi' salió en la noche del 31 de octubre con sus mascotas: "Hemos hecho una fiesta un grupo de amigos y queríamos acercar los perros a los niños con la Asociación Vecinal Almar", concretaba Gonzalo. Los de la 'Perripandi' no estuvieron solos y muchos fueron los que apostaron por poner a su perro algún atuendo propio de Halloween.