Ciudadanos en su encrucijada: radiografía en Málaga

A nivel orgánico, el partido está dirigido por un comité provincial del que forman parte el parlamentario andaluz Carlos Hernández White como portavoz; Vicente Sánchez, cargo de confianza en la Diputación, al frente de Organización; el exedil de la capital Alejandro Carballo como responsable de Comunicación; la parlamentaria Teresa Pardo como secretaria de Acción Institucional; la edil en Marbella María García al frente de Relaciones Institucionales; y el vicepresidente primero de la Diputación, Juan Carlos Maldonado, como secretario de Programas.

Una dirección coral muy próxima a quien es uno de los rostros más conocidos y uno de los políticos con más peso en el partido como es Guillermo Díaz, diputado, miembro de la gestora que dirige la formación a nivel nacional e integrante de la ejecutiva con la que Arrimadas aspira a suceder a Rivera. Además, de los 16 compromisarios malagueños que estarán en la asamblea, once son afines a la política catalana, dos sintonizan con Igea y los otros tres (Javier Toro, Beatriz González y Juan Cassá) no se han decantando públicamente por ninguno de los candidatos.

En el plano institucional, Ciudadanos presentó candidaturas en 33 de los 103 municipios de la provincia en las elecciones del 26 de mayo de 2019, obteniendo representación en 23 de ellos con un total de 49 concejales. Sin embargo, a día de hoy, son dos menos ya que en Torremolinos, el que fuera candidato a la Alcaldía y que también optó a ser lehendakari Nicolás de Miguel abandonó en octubre del pasado año la formación por discrepancias con el rumbo tomado por el partido, y en Alcaucín, Sara Matés dejó la formación el pasado enero un día antes de que se votara la moción de censura, impulsada por Ciudadanos y el PP para desbancar a la alcaldesa socialista de este municipio de la Axarquía, Ágata González, y que finalmente no prosperó.

Ciudadanos tiene una única Alcaldía, la de Guaro, José Antonio Carabantes, y juega un papel fundamental en cuatro municipios, donde garantiza la gobernabilidad formando parte de los equipos de gobierno: en la capital y Rincón de la Victoria es aliado de los alcaldes del PP, Francisco de la Torre y Francisco Salado, respectivamente, mientras que en Algarrobo y Mijas, sustenta a los regidores socialistas Alberto Pérez y José Antonio González, respectivamente. Los dos diputados de Ciudadanos son claves para la gobernabilidad de la Diputación ya que forman parte del gobierno con el PP. Juan Carlos Maldonado es el vicepresidente del ente supramunicipal, mientras que Juan Cassá –que mantiene diferencias con el partido– no se integró en el gobierno.

A nivel andaluz, Ciudadanos cuenta con cuatro parlamentarios autonómicos: Carlos Hernández White, Teresa Pardo, Javier Pareja de Vega y Javier Imbroda. Este último, al frente de Educación y Deportes, es uno de los dos consejeros malagueños de la formación liberal en el gobierno de la Junta, la otra es Rocío Blanco.

En el Congreso hay un sólo representante de Ciudadanos por Málaga, Guillermo Díaz, tras las elecciones generales de noviembre, donde los liberales perdieron el segundo representante que habían conseguido en los comicios de abril de 2019. En esos dos comicios, los liberales pasaron en la provincia, uno de sus feudos, de ser la segunda fuerza política a la quinta y perdieron 93.000 votos y el 10,6% de los apoyos, en línea con el batacazo que sufrieron a nivel nacional.