Más calor, sequía y lluvias torrenciales, la previsión de la Diputación en 20 años para Málaga

El informe proyecta dos escenarios posibles de cara a 2040, esto es, dentro de menos de dos décadas: uno de ellos condicionado por las medidas que se puedan adoptar y que frenen (en parte) los efectos del cambio climático; y un segundo escenario, en el supuesto de que no se haga nada significativo al respecto. Así, Salado afirma que el clima evolucionará del actual mediterráneo a uno más seco y cálido, con temperaturas más altas, reducción de la humedad en las zonas más altas de la provincia y episodios de lluvia cada vez menos frecuentes pero torrenciales. De este modo, algunos hábitats específicos y microclimas asociados a lugares elevados, como la Sierra de las Nieves, se retraerían a mayor altura, por lo que sería necesario ascender más para poder encontrar zonas con un clima y una biodiversidad como los que podemos observar actualmente.

En el mejor de los escenarios, estos cambios se notarán de una forma moderada a la zona más oriental de la provincia, el este de la comarca de Antequera y la zona de Casares, en el litoral occidental. En el caso más desfavorable, aparte de esas zonas, habría una «tropicalización severa» en la comarca de Antequera y en la Serranía de Ronda, donde la temperatura media aumentará entre 1,3 y 1,5 grados. En el resto de la provincia la subida llegará a los 1,2 grados.

En cuanto a las precipitaciones, Salado llama la atención sobre lo que ya está ocurriendo en la Axarquía, con el embalse de La Viñuela en un nivel alarmantemente bajo. Las lluvias tenderán a concentrarse en menos días al año, pero con más episodios torrenciales, en el mejor de los casos, con lo que ello conlleva en cuanto a la erosión y la bajada de la capacidad de embalse y de recarga de los acuíferos. En el peor de ellos, podrían reducirse hasta en 34 litros por metro cuadrado en la zona occidental, precisamente la que a día de hoy recoge más volumen.

«Es un escenario preocupante ante el que sólo cabe actuar reduciendo emisiones y llevando a cabo medidas favorables para el medio ambiente», admite el presidente supramunicipal. Entre estas últimas, cita las repoblaciones forestales que la institución lidera en la provincia, que ya han supuesto la plantación de 350.000 ejemplares, y que seguirán hasta llegar a un millón. El Vivero Provincial produce ejemplares de jacaranda, encina, algarrobo y quejigo; frutales como almendros, granados, higueras y nogales, y arbustos mediterráneos como la lavanda, el romero y el tomillo, que son los que se emplean para que los voluntarios puedan repoblar los parajes naturales de la provincia.

Preguntado sobre las acciones necesarias para combatir el calentamiento, Francisco Salado afirmó: «El tren litoral sería la mejor inversión contra el cambio climático, quitar coches, emisiones y caravanas, el tren es el transporte del futuro».

Para canalizar el compromiso medioambiental de colectivos y particulares en la provincia, la Diputación acaba de lanzar la iniciativa 'Málaga más viva', «un punto de encuentro de colectivos y personas que luchan contra el cambio climático», en palabras de Francisco Salado. A través de la web (malagamasviva.org) se ha activado un repositorio de todas las acciones contra el cambio climático que se llevan a cabo en la provincia, entre los que el próximo fin de semana destaca una reforestación participativa en la Serrania de Ronda.

De esta forma, la plataforma permite a la ciudadanía encontrar actividades de protección del medio ambiente en las que participar de forma voluntaria, y a las empresas y entidades, difundir sus buenas prácticas en esta materia. La plataforma se enmarca en el plan Málaga Viva, creado por la Diputación en 2016 para luchar contra el cambio climático.