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María del Mar sostiene el «botón» de Carmen, una de las usuarias de este servicio en Málaga. Migue Fernández
20 años de teleasistencia en Málaga: «Hay que tener una sensibilidad especial por los demás»

20 años de teleasistencia en Málaga: «Hay que tener una sensibilidad especial por los demás»

En la provincia hay 40.100 usuarios registrados. Una de ellas es Carmen, que ve al «botón» como un elemento imprescindible en su vida

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Jueves, 24 de febrero 2022, 17:04

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A veces pulsar un botón puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. El objeto en sí es un ejemplo de que la tecnología puede ser simple y tremendamente eficaz al mismo tiempo. Pesa apenas unos gramos y se puede llevar colgando del cuello o de la muñeca. A Carmen Jiménez, 73 años y vecina del Puerto de la Torre, le acompaña desde hace más de diez años. «El botón», como ella lo llama, lo heredó de su madre. Carmen sufre osteoporosis y tiene problemas de movilidad. «A los 38 años me quitaron la matriz y ahí empezaron los problemas». Carmen es una de las 245.235 usuarias de la teleasistencia de la Junta de Andalucía, un servicio que acaba de cumplir 20 años. En Málaga, según la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, hay 40.100 personas registradas en este servicio.

Carmen cojea un poco cuando anda y habla de una «vida entregada en su totalidad a su hijo» que ahora tiene 51 años. Francisco, así se llama, nació con parálisis cerebral. Una minusvalía del 89% reconocida. Hay veces que se pone «muy tenso» y entonces a ella no le queda más remedio que pulsar el botón y pedir asistencia. Cuando se le pregunta por cómo funciona el servicio se le ilumina la cara. «Las personas al otro lado te atienden de manera perfecta. A veces son ellas las que te llaman y preguntan por cómo estás. El día de mi cumpleaños me felicitan», expresa.

Ellas son personas como María del Mar Andrés. Es trabajadora social y está al otro lado de la línea. «Hay que tener una sensibilidad especial por los demás y se requieren ciertas habilidades sociales», explica que cualidades hay que tener para poder desempeñar este trabajo. Las llamadas se producen a diario. A veces pasa que lo único que hay al otro lado es que alguien necesita hablar. La soledad es un problema que afecta sobre todo a las personas mayores. María del Mar reconoce que a veces les toca ejercer de psicólogos. «Nada más por el tono de voz podemos detectar qué hay detrás de la mayor parte de las llamadas», precisa.

Carmen agarra el botón y lo pulsa para enseñar cómo funciona. Enseguida resuena en el salón de su casas el siguiente mensaje, que es emitido por el aparato de teléfono: «Está llamando al servicio de teleasistencia, enseguida le atendemos». Pocos segundos después, ya se escucha la voz de una de las trabajadores de este servicio. «Hola Carmen, ¿todo bien?». Y así se pone en marcha una conversación en la que esta vecina del Puerta de la Torre explica el motivo de la llamada, que no era otra que probar el buen funcionamiento del servicio ante la presencia de este periódico.

La mayoría de las llamadas que se producen son de seguimiento y las realizan los propios profesionales. No hay listas de espera para solicitar el «botón». Solo se precisa cumplir con alguno de estos tres requisitos: tener más de 65 años, ser dependiente o tener reconocida una minusvalía. El 61% de los usuarios de la teleasistencia viven solos. El responsable de la Jefatura del Servicio del Servicio Andaluz de Teleasistencia, José Vargas, indica a SUR que «el servicio se ha consolidado durante estas dos décadas de trayectoria y hoy día es una marca reconocida que genera una confianza plena entre sus usuarios».

Francisco Pérez, 75 años, es otro malagueño que disfruta de este servicio. «Medalla» o «botón». Eso a él le da igual. Lo único en lo que asevera es en calificar el servicio de «excelente». Francisco ha sido conductor de la EMT hasta que se tuvo que jubilar de manera forzoso por padecer de «varios tumores». Una vez vencido el cáncer, tiene reconocido una minusvalía. «Yo me siento más seguro sabiendo que puedo llamar y me van a asistir enseguida si me pasa algo», dice.

El Servicio de Teleasistencia comenzó a rodar con solo 16 profesionales que atendían a 120 personas, incrementándose hasta los 600 empleados de la actualidad que dan cobertura las 24 horas los 365 días del año desde sus centros operativos de Sevilla y Málaga, y con un rostro muy femenino, ya que el 90% de su plantilla son mujeres.

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