La alta demanda de aceite y la falta de reservas auguran nuevas subidas de precio
Las almazaras de Málaga están bajo mínimos y aún quedan cinco meses para el comienzo de la nueva campaña y la entrada de nuevo producto
Si hay algún consumidor que aún mantiene esperanzas de pagar menos por el litro de aceite, las puede enterrar. Al menos, hasta el comienzo de ... la próxima cosecha de la aceituna en octubre. La situación actual del mercado es la de un choque entre una alta demanda y poca oferta. Esto significa que las reservas de las almazaras, el llamado stock de enlace, están bajo mínimos, pero la demanda por consumir aceite sigue siendo alta. Tanto a nivel nacional como fuera de España, como refrenda el tirón de la exportación. Las fuentes del sector consultadas por SUR auguran «una tensión de precios» si esta fuerte demanda se mantiene en los próximos meses.
No hay argumentos para que no sea así. El paso del tiempo ha demostrado que el consumidor no quiere renunciar al aceite de oliva. «Esto se explica en el contexto inflacionista en el que estamos. Si solo se hubiera encarecido el aceite… Pero ahora todo es más caro y el consumidor asume el incremento de precio en el aceite», señala una de las fuentes.
Noticia relacionada
Los precios de los alimentos se moderan al 4,4%, pero el aceite sigue disparado
Lo refrendan también los últimos datos aportados por el Ministerio de Agricultura. Con fecha de 31 de mayo, las existencias finales en las almazaras de Andalucía son 240.246 toneladas. En la provincia de Málaga, es de 9.943 toneladas. «Son datos bajos, diría que los más bajos que hemos tenido, si no en la historia, en muchísimos años», confiesa un agricultor.
Para entender el contexto de precios, hay que añadir las existencias de aceite a nivel nacional. Las perspectivas no son más halagüeñas. España sigue siendo el país productor que dispone de más volumen de aceite, pero son reservas inferiores a las de otros años. El Ministro de Agricultura cifraba estas reservas en 576.000 toneladas a finales de abril. La demanda mensual se mueve en estos momentos en unas 104.000 toneladas. Con 576.000 toneladas y cinco meses por delante hasta poder contar con partidas de la nueva cosecha, se evidencia una futura estrechez en el mercado.
«Ahora mismo, la situación es crítica. Después de varias campañas malas, apenas queda stock. Si a eso le sumamos que las salidas están siendo altas, en el mercado interior como para la exportación, estamos con la realidad que tenemos ahora», confiesa el presidente de Asaja, Baldomero Bellido.
Evolución
Si hay una bajada de precios para el consumidor, ésta será en el medio plazo. En el campo hay cierto optimismo con la próxima cosecha. Después de varios años en los que la sequía ha reducido la producción de aceite, las lluvias abundantes del pasado mes de marzo llegaron en el mejor momento, cuando se estaba formando el fruto.
«La recogida de la aceituna empieza en octubre, pero hasta noviembre no esperamos que se refleje en el precio del aceite», deja claro Bellido. Entonces, por primera vez en mucho tiempo, el precio por un litro de aceite de oliva podrá bajar de los diez euros.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
