Alimentar a las colonias de gatos callejeros es una causa autorizada para salir de casa

Ignacio Lillo

Málaga

Lunes, 23 de marzo 2020, 13:39

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Salir de casa para alimentar a gatos callejeros que viven en colonias (por ejemplo, en solares abandonados), los llamados técnicamente ferales, está autorizado expresamente desde el pasado sábado, 21 de marzo, cuando el BOE recogió una instrucción del Ministerio de Sanidad sobre «criterios interpretativos para la atención de animales domésticos» durante la crisis sanitaria del coronavirus. El documento cita textualmente que, «para prevenir un impacto negativo en la salud pública», personas y entidades voluntarias «debidamente acreditadas» por los ayuntamientos, podrán seguir alimentando, rescatando y llevando al veterinario a «animales domésticos que habitan en espacios públicos urbanos». La norma recomienda hacerlo en horarios con menos afluencia de personas y espaciar las entregas al máximo.

El problema, según explica Carmen Manzano, presidenta de la Protectora de Animales de Málaga, es que algunos agentes, sobre todo en municipios de la Costa como Torremolinos y Fuengirola, no lo están permitiendo, puesto que esos consistorios no han establecido todavía un sistema CER (captura, esterilización y retorno) para la gestión de estos grupos de felinos, y por tanto carecen de una acreditación oficial, algo que en la capital ya está plenamente implantado. «Alimentarlos es legal y no puede depender del criterio del policía que le pilla a cada uno», declara Manzano, y asegura que las asociaciones que trabajan en esta línea han recomendado a las cuidadoras (son, en su mayoría, mujeres) que sólo repongan dos veces en semana, incluso se están fabricando unas tolvas con tetrabricks para que no se moje el pienso. «No podemos permitir que se queden sin comer durante tantos días de confinamiento. Con un poco de voluntad se puede ayudar a todos».

El caso de la capital es, a su juicio, «ejemplar», ya que desde el Área de Medio Ambiente se ha informado a la Policía Local de las nuevas instrucciones, incluso con listados de personas autorizadas para llevar a cabo esta labor. Al respecto, la presidenta del Refugio reclama a los ayuntamientos y a la Diputación que informen a las respectivas policías locales para que no dificulten el trabajo de estos voluntarios; así como también a quienes acudan para prestar auxilio en los refugios y otros lugares donde haya animales domésticos bajo el cuidado de personas.