Vecinos de Campanillas marchan en protesta por la falta de medidas frente a las inundaciones

Al comienzo, en el cercano parque del Brillante, que resultó muy afectado por el desbordamiento, Manuel Becerro, portavoz de la asociación de vecinos Evolución, leyó un comunicado en el que puso de relieve que aquellas inundaciones marcaron sus vidas, y denunció que todavía no se han tomado las medidas necesarias para solventar estos problemas. El dirigente vecinal recordó que ya el año pasado por estas fechas también hubo una inundación, aunque menor que la anterior, lo que demuestra, a su juicio, que la amenaza persiste. «Es patente que Campanillas necesita mejoras en el río y en sus arroyos, así como otras infraestructuras que esperan en un cajón». Además, recordó que todavía muchos damnificados están esperando a que se arreglen los daños en sus viviendas. «Necesitamos hechos y seguridad para seguir prosperando como barrio».

Daniel Pérez aseguró que el PSOE se suma a las reivindicaciones «históricas» de los vecinos y destacó que falta mucho por hacer para evitar situaciones como las descritas, y que deberían ser ejecutadas por la Junta de Andalucía y por el Ayuntamiento de Málaga (ambas instituciones gobernadas por el PP). «Es una reivindicación justa que se tiene que conseguir», afirmó. En términos similares, Mar González instó a que todas las administraciones «pongan de su parte para que esto no se repita», y criticó que el de Campanillas es «uno de los distritos más maltratados» de Málaga.

Unas horas antes de la protesta vecinal, el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de la capital ofreció una rueda de prensa para detallar las actuaciones que ha ejecutado, tiene en marcha o que va a realizar para reducir el riesgo de inundación en varios puntos de la capital, entre ellos en Campanillas.

El concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, y la concejala del distrito, Ruth Sarabia, destacaron que estos proyectos suman 9,6 millones de euros y abarcan actuaciones de encauzamiento de arroyos, así como obras de drenaje para controlar y redirigir el exceso de caudal que se pudiera dar, a través de la realización de embovedados o tuberías que dirijan las aguas para evitar daños estructurales que puedan ocasionar interrupciones de tráfico, daños en el entorno, etcétera. Además, también incluyen los trabajos realizados en las redes de saneamiento para su mejora o para aumentar su caudal, de forma que puedan absorber mayor cantidad de agua en el caso de fuertes lluvias.