Tensión en la estación María Zambrano de Málaga: ¿por qué hay tantas colas para embarcar en los trenes?
Las filas de esta mañana delante del control de seguridad han ocupado todo el vestíbulo de la terminal, aunque Adif asegura que nadie se quedó en tierra
A veces ocurre, pero pocas como la que ha sucedido esta mañana. La imagen de hoy hacia las 8.00 horas en la estación de ... alta velocidad María Zambrano de Málaga era la de una larga cola de pasajeros esperando para pasar el control de seguridad. La fila se ha extendido desde el punto de acceso a los andenes hasta la misma entrada al edificio, a lo largo de todo el gran vestíbulo.
Esta situación ha provocado momentos de tensión entre los pasajeros que aguardaban, al ver acercarse la hora de la salida programada de sus trenes, mientras que la cola apenas avanzaba. Esto ha hecho que los usuarios afectados carguen contra el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y el Ministerio de Transportes, por tener habilitados únicamente dos puntos de control de los equipajes y pocos profesionales para acceder a la zona de andenes.
«Es vergonzoso, que haya sólo dos pasillos con vigilantes para acceder a los trenes no es normal en una estación con tantos viajeros como la de Málaga, tendría que haber al menos el doble», denunció un lector afectado a este periódico.
Esta ha sido la razón que han esgrimido los viajeros, pues el cuello de botella (al menos, el más visible) estaba en el arco de seguridad, donde todas las maletas tenían que pasar por sólo dos escáner. Cabe recordar que hoy era el día para la vuelta de muchos visitantes tras el largo puente festivo del 1 y 2 de mayo en Madrid.
Tres trenes y 1.200 viajeros
En cambio, la razón era otra: la cola a primera hora se ha formado por coincidir con pocos minutos de diferencia la salida de tres trenes, un AVE de Renfe con destino a Madrid (8.05 horas); un Iryo también a la capital española (8.07) y un AVE a Barcelona (8.25). Este último, además, con un gran número de equipajes, según los datos aportados por Adif, que pone de relieve que en ese corto espacio de tiempo se han presentado en la terminal hasta 1.200 viajeros.
Estas fuentes tranquilizan a los usuarios al asegurar que nadie que esté en la cola se queda sin viajar, aunque en ocasiones esto suponga que sea necesario retrasar unos minutos la hora de la salida programada de los trenes (ese tiempo se suele recuperar luego durante el trayecto). Además, desde Adif añaden que la tarea que se denomina oficialmente como «radioscopia» se atiende normalmente con dos puestos «de manera suficiente».
Todavía hay otras razones para estas largas esperas, que, en cualquier caso, son puntuales. Y es que, en ocasiones, los operadores de alta velocidad (Renfe e Iryo, en el caso de Málaga) pueden sufrir demoras en la llegada de su personal propio de revisión de billetes antes de embarcar en los convoyes. En estos casos, pueden solicitar a Adif que parecen el control de los equipajes, para no tener a los pasajeros esperando en el andén.
Además, la puntualidad generalizada de los servicios ferroviarios de alta velocidad entre Málaga y Madrid hace que muchos pasajeros esperen hasta el último momento para acceder a la estación. Con lo que la llegada no es escalonada, sino que los viajeros se agolpan en la cola apenas unos minutos antes de la hora programada, lo que retrasa el paso por el arco de seguridad.
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