¿Por qué no se borran las numerosas pintadas de Ciudad Jardín?

Esto es problemático, pues se repite en varios puntos de Ciudad Jardín. Ya es un clásico ver las pintadas de 'custodia compartida' y las diferentes opiniones y discrepancias sobre este tema, que llenan las fachadas del campo de fútbol del barrio.

Estas no llevan tanto tiempo como las primeras, pero pese a las denuncias, no se han limpiado. Lo mismo pasa con las del Camino de Casabermeja, a pocos metros de allí.

Los vecinos de todas estas zonas se han quejado en varias ocasiones a SUR, y la denuncia es clara: «¿Por qué nadie borra todas las pintadas y mensajes de las paredes? Hemos leído hace poco que en Capuchinos también pasa, y no entendemos por qué en nuestro barrio, que por cierto, también hay negacionista, tampoco se borran de las paredes. No creemos que cueste demasiada inversión dejar el barrio limpio y sin guerras de custodia, pintadas de simple firma o lo que es peor, a favor de la guerra o haciendo propaganda sobre que el Covid no existe. Sabemos que las administraciones leen los periódicos, es entonces cuando nos preocupa el caso omiso que nos hacen a algunos barrios concretos» se queja Juan A., vecino de toda la vida de Ciudad Jardín, con cierta indignación.

Muchas de las zonas del entorno del Hospital Regional (antiguo Carlos Haya) convierten la calle en un caos momentáneo que molesta a viandantes y conductores. Nadie está del todo contento. Así lo razona un residente de la vía, que además es transeúnte habitual, ya que pasa a diario por toda la calle para ir al trabajo: «Problemas hay muchos. En primer lugar, tiene un surco en mitad del carril derecho. Cambias de carril con la moto y te puedes caer con gran facilidad, de hecho más de un susto me he llevado durante este año dirección Mármoles» avanza, y explica que la carretera está «hundida» en muchos de sus tramos. Con respecto al carril bici, también hay denuncias, en esta ocasión de una vecina, Cristina: «Con las terrazas de los bares y el carril bici un tramo de Martínez Maldonado no tiene acera».

Hay varios vecinos que se llevan quejando de la situación que se describirá en esta líneas «más de tres años»: «Hay varios focos en la fachada del Hospital Civil que deslumbran mucho a los edificios colindantes, en los que vivimos muchas personas. Es muy desagradable, pues la potente luz no nos deja dormir a muchos de nosotros», se queja una lectora habitual de SUR, que espera «algún tipo de solución».