Así es la operación que le van a hacer a Oliver, el niño malagueño con un tumor cerebral
La intervención consiste en la apertura del cráneo por la región posterior para extirpar la tumoración con técnicas de microcirugía
La operación que se le hará a Oliver, el niño malagueño de dos años que sufre un tumor cerebral, y que va ser trasladado este martes desde México a Barcelona ... en un avión medicalizado para ser intervenido, consiste en la apertura del cráneo por la región posterior (región suboccipital) para, mediante técnicas de microcirugía, proceder a la extirpación de la tumoración, que por la localización bloquea las vías de paso del líquido cefalorraquídeo y produce de forma secundaria un cuadro de hidrocefalia, por lo que hay que tratar también ese acúmulo de líquido, ha explicado a este periódico el jefe del servicio de neurocirugía del Hospital Regional de Málaga y presidente de la Academia Mundial de Neurocirugía, Miguel Ángel Arráez.
Este prestigioso neurocirujano ha indicado que la operación, que está previsto que se le realice a Oliver en el hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, es la intervención quirúrgica más frecuente que se hace sobre un tumor cerebral pediátrico en el Hospital Materno Infantil de Málaga.
«Para nosotros, este es un caso rutinario, que se opera con frecuencia. En el servicio de neurocirugía del Hospital Regional de Málaga contamos con el doctor Bienvenido Ros, que es un gran experto en este tipo de intervenciones», ha asegurado el doctor Arráez y ha añadido, en relación a Oliver: «Al niño hay que operarlo indiscutiblemente. En estas situaciones, normalmente, hay que empezar por la retención de líquido cefalorraquídeo poniendo lo que se llama un drenaje ventricular y luego actuar sobre el tumor».
Actuar con rapidez
El presidente de la Academia Mundial de Neurocirugía ha precisado: «Algunas veces, ambas actuaciones las hacemos simultáneamente en la misma intervención quirúrgica, dependiendo del caso, pero sin duda en los tumores de fosa posterior, como están en la zona del cerebelo, que es una cavidad del cráneo más reducida, hay un poco menos de margen y hay que actuar con más rapidez».
El pequeño Oliver nació en Málaga en 2020, durante el primer año de pandemia. Su padre también es malagueño, del barrio de El Torcal, y su madre alemana, aunque llevaba en Málaga desde 2010. «Con la pandemia se paralizó medio mundo y nosotros decidimos venirnos a México para tratar de trabajar en lo mío», ha explicado el padre, que trabaja como técnico y también como instructor de buceo en Playa del Carmen, zona costera muy turística de la Península de Yucatán, con gran riqueza de fondos marinos.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
