La nómina del alcalde de Málaga

Primero, hay que poner sobre la mesa que el sueldo bruto del alcalde es, como el de todos los ediles la Corporación, un 20% más que en junio de 2019. Es cierto que el grupo municipal Adelante Málaga (Podemos e IU) votó en contra de la subida cuando se constituyó la nueva Corporación, pero también lo es que, aunque lo hiciera, que en sus nóminas los tres ediles de esta formación ven reflejado el incremento mes a mes. Pero, a lo que íbamos: De la Torre percibe anualmente 79.981,02 euros brutos por catorce pagas (las dos extra). Cada mes, y así se refleja en el extracto colgado en la web municipal, recibe 3,846,96 euros netos, una vez descontadas la cuota a la seguridad social, 191,29 euros; la cuota al Fogasa, 4 euros; y el IRPF, 1784,87 euros. En su caso, la retención que le practica el área de Recursos Humanos es alta, un 30% de IRPF, lo que tiene que ver con que no tiene hijos a su cargo y a su elevado sueldo, lo que más tarde posibilitará que tenga que tributar menos –por haberlo hecho ya antes– cuando Hacienda pase el rodillo a mitad de año. En realidad, sus emolumentos netos serían anualmente, según ha consultado ese periódico a fuentes municipales, el resultado de sumar sus salarios líquidos al mes por catorce pagas, lo que arrojaría un total de 53.857,44 euros.

Por hacer el recorrido con el resto de los miembros de la Corporación, pero en este caso sus salarios en bruto, que son los que conocemos, éstos son los siguientes: los portavoces del equipo de gobierno municipal ganan de entre 70.800 a 71.982 euros brutos al año y los de la oposición; 67.984 euros brutos al igual que los tenientes de alcalde. Los concejales con cartera, 63.984 euros brutos al año al igual que los portavoces adjuntos de los grupos de la oposición; y un concejal con dedicación exclusiva, 57.586 euros.

No parece que la sangre vaya a llegar al río habida cuenta de lo pragmático que siempre ha sido De la Torre, que lleva veinte años sin que nadie le mueva la silla, y a su vez la portavoz naranja, Noelia Losada. Pero sí es cierto que el affaire Cassá ha erosionado en cierta forma las buenas relaciones que tenían ambos socios de gobierno.

La portavoz naranja quería subrayar ayer, respondiendo a las palabras de la popular Elisa Pérez de Siles, que la falta de lealtad no ha estado en sus filas, ya que ha sido el PP quien ha votado en contra de una moción que ha presentado Ciudadanos, cuando los naranjas nunca habían hecho al revés algo así. «Además, fui tan leal que el día anterior llamé al alcalde para decirle cuál iba a ser mi moción urgente; lo que no se hace con este tipo de iniciativas, que fue cuando me dijo que la retirara y se abordara en la junta de gobierno loca. Ahí le indiqué que no lo iba a hacer». La iniciativa, en concreto, es la que explicábamos ayer, para reducirle los emolumentos al exnaranja y que pase a cobrar 50 euros en vez de 500 y 250 por asistencia a plenos y comisiones, respectivamente. «Ha sido el PP el que se ha quedado solo votando en contra de la regeneración democrática, en contra de mi iniciativa y de la del PSOE para declarar tránsfuga a Cassá; cuya crisis no ha sido plato de gusto para nadie«, puntualizó Losada.