El Ministerio de Fomento dará hoy en Málaga su visto bueno al hotel del Puerto

La Deup es básicamente un plano de ordenación de los suelos portuarios y del uso que tendrán. Dentro de este, la parcela del morro ya está legalmente destinada para el uso hotelero, al menos en lo que a la ordenación de Puertos del Estado se refiere. Este ha tardado dos años y medio en tramitarse, y está desde noviembre del año pendiente de la aprobación por parte del Ejecutivo central. También es cierto que es la primera vez que la Autoridad Portuaria cuenta con esta base normativa. Se trata de una zonificación del ámbito de los muelles conforme a sus usos. De manera que, además del hotel, autoriza el resto de actuaciones previstas dentro del Plan Especial y de su revisión, tales como los usos comerciales de Muelle de Heredia; el uso para hostelería que podrá tener en adelante el pequeño cubo de cristal que está en el Muelle Uno, y que inicialmente se pensó como estación marítima. Así como la delimitación del ámbito del futuro puerto deportivo de San Andrés, entre otras.

Al respecto, también cabe recordar que la Autoridad Portuaria ha comenzado ya a llevar a cabo las contrapartidas que la Demarcación de Costas y el Ayuntamiento le exigieron para dar sus informes favorables a la Deup. Se trata de la estabilización de la playa de Huelin, que ya ha tenido una primera fase con el aporte de unos 5.000 metros cúbicos de arena, y que es responsabilidad de esta institución. Así como de la luz verde, en el último consejo de administración, a las obras necesarias para restaurar el espigón de La Térmica.

Se trata de un avance sustancial, pues sin este no se podría acometer nunca el proyecto. Pero no es –ni de lejos– el último paso burocrático necesario antes de que se pueda empezar a construir sobre el terreno. De entrada, la compleja hoja de ruta para que el hotel de lujo pueda llegar a ser una realidad todavía tiene que afrontar el cambio del Plan Especial. Este, a su vez, requiere superar la Evaluación Ambiental Estratégica, por parte de la Delegación de Medio Ambiente de la Junta, conforme a la Ley para la Gestión Integral de la Calidad Ambiental (Gica).

Aunque inicialmente se apuesta por la primera, todavía no se sabe si podrá ir por la vía simplificada (que tardaría cuatro meses) o por el procedimiento ordinario (nada menos que 18). Superada esta fase, la Gerencia de Urbanismo tendrá que completar la modificación del Plan Especial (tardará al menos un año) previa consulta a todas las administraciones implicadas.

El expediente completo se remitirá a Puertos del Estado y al Ministerio de Fomento, que lo tendrán que rubricarlo, y elevarlo para el visto bueno definitivo del Consejo de Ministros. Pero, al contrario de lo que pudiera parecer, ello no significa que terminen los trámites. Y es que, antes de conseguir la licencia de obras, el proyecto tendrá que obtener la Autorización Ambiental Unificada, por ser un hotel que supere más de 15 plantas (de nuevo, imposición de la citada Gica).

A este paso, si es que consigue finalmente superar la farragosa hoja de ruta, según los cálculos de este periódico el inicio de los trabajos sobre el terreno no se podría producir hasta el año 2020.