Legión 501: Villanos de todo corazón

Desde el interior del casco de un soldado de asalto imperial no se ve prácticamente nada. Los diminutos cristales verdes del visor se empañan con el sudor hasta el punto de que muchos llevan ventiladores internos para no asfixiarse. Una solución que genera un zumbido constante que hace que tampoco se escuche mucho desde dentro. Pero hay algo que sí se percibe: las risas y los gritos de felicidad de los más pequeños cuando ven pasar a sus personajes favoritos. «¡Mira mamá, ese es Kylo Ren, mi muñeco!», grita un pequeño al ver al villano de Star Wars.

Ese es el objetivo principal de la Legión 501, un grupo de aficionados de la Guerra de las Galaxias que destina su tiempo de forma desinteresada a visitar hospitales y a estar presentes en actos benéficos. Son conocidos como «los chicos malos que hacen cosas buenas» por estar compuesto por villanos de la saga galáctica. Este sábado congregaron a miles de personas en la capital, pero no es la primera vez que vienen a Málaga de forma multitudinaria. En 2012, la Fundación Andrés Olivares también les traía para concienciar a la ciudadanía de la importancia de la donación de médula. Algo que repitieron este sábado bajo el lema «Haz que tu corazón sea el de un niño». Porque ante todo, ese era el objetivo principal de este desfile: conseguir apoyo para niños enfermos de cáncer y sus familias.

De nuevo, miles de personas se reunieron a lo largo de todo el recorrido. Una estampa que se puede ver en Semana Santa y que en esta ocasión cambió las tribunas con sillas de madera por el hormigón del suelo, donde cientos de niños esperaban sentados a sus héroes, o mejor dicho, villanos.

«¡¡Señor Vader, Señor Vader, aquí!!», se escuchaba cuando el Lord Sith pasaba entre la multitud. Solo querían hacerse una foto con el gran villano de la saga. Algo a lo que este, con sus más de dos metros de estatura, accedía de buena gana. «Niños, no olvidéis comer verdura y estudiar mucho para llegar a ser como nosotros», les decía un soldado de asalto (Stormtrooper en inglés) a un gran grupo de pequeños que se habían congregado junto a él mientras les daba la mano.

A diferencia de la primera vez que tomaron las calles del centro de Málaga, en esta ocasión ha habido dos cambios destacables. Por un lado, el Emperador Palpatine desembarcó en el Muelle Dos desde el patrullero Tagomago que la Armada Española había cedido para la ocasión. Allí le esperaba Darth Vader junto a un séquito de oficiales. Por otra parte, en la cabeza del desfile, además de ir un grupo de pequeños disfrazados, iba el droide rosa R2-KT, similar a R2-D2, que fue creado en honor a la pequeña Kate Johnson, hija del fundador de la Legión 501, Albin Johnson. La niña falleció en 2005 y su robot se ha convertido en un icono ligado a los actos benéficos de Star Wars. Unos actos donde los cascos también sirven para ocultar las lágrimas de alegría que en ocasiones recorren la cara de algunos voluntarios.

Todos los vídeos del desfile de la Legión 501 de Star Wars en Málaga: