Un juzgado cita como investigado a Espinosa por el uso indebido de dinero municipal

Como adelantó en julio este periódico, el Ministerio Público pidió al juzgado que incoase las correspondientes diligencias previas para dilucidar «las posibles responsabilidades penales» de Espinosa, ya que la Fiscalía entiende que el edil podría haber gastado esa suma de dinero «en su propio beneficio».

Este verano, y tras salir publicada esta información, el edil abandonó todos sus cargos de forma cautelar dentro del partido Podemos. Consultado ayer el concejal por este periódico declinó hacer declaraciones respecto a su delicada situación judicial.

Era abril de este año cuando la Fiscalía procedía a archivar las diligencias de investigación que tenía abiertas contra Málaga Ahora, tras una denuncia que le pusieron exintegrantes de la misma formación y simpatizantes de Espinosa. Pero no quedó ahí la cosa:dándose la literal vuelta a la tortilla, el fiscal apreció indicios de delito de Espinosa, por lo que empezó a investigarle. En el pronunciamiento inicial, la Fiscalía fue muy crítica con el pleno de la ciudad, y denunció la «inacción» de la obligación que tiene para que las asignaciones de los grupos municipales sean justificadas en la forma que el mismo establezca, y criticó que en aquella fecha aún no se hubiese procedido a poner en marcha un procedimiento para realizarlo conforme el artículo 73.3 de la Ley de Bases de Régimen Local. La Fiscalía hablaba de «falta de rigor contable» en el Ayuntamiento de Málaga en lo referente a las cuentas de los grupos municipales, y tras el rapapolvo finalmente se puso en marcha, a raíz de la aprobación de los Presupuestos 2018, un sistema para fiscalizar los gastos de los grupos municipales y las finalidades a las que podían dedicarse.

Más tarde, el Ministerio Público, en su informe del mes de julio, explicaba respecto al caso de Espinosa que «la distracción o apropiación de dicha cantidad de dinero (los citados 3.882,84 euros) de confirmarse, sería constitutivo de un delito de apropiación indebida (si es dinero privado) o de malversación de caudales públicos, si su procedencia, como parece acaecer en el presente supuesto, es de procedencia pública».

Además, la Fiscalía veía otro presunto delito, el de falsedad documental, puesto que entiende que el edil para intentar justificar ese dinero aporta facturas «que no se corresponden con ninguna actividad prestada por la asociación que la expide», que en este caso era Malaka Kiriku. En concreto, cuando Málaga Ahora le pedía que justificase sus gastos, Espinosa aportó cuatro facturas de esta empresa, que «según se afirma son negadas su emisión por la propia asociación. De responder ello a la realidad estaríamos ante la posible existencia de un delito de falsedad», subraya la Fiscalía en su escrito.

Entre otros gastos, Espinosa incluía compras poco propias de la labor de un grupo municipal como botellas de whisky, ron, ginebra, compresas, bastoncillos para los oídos, etc, que causaron un gran revuelo mediático en octubre de 2016, después de que el edil abandonara su antiguo grupo municipal. Málaga Ahora pidió en varias ocasiones al pleno que se fiscalizasen sus cuentas y finalmente optó por pagar una auditoría, que sacaba a relucir el gasto que Espinosa no había justificado –los citados 3.882,84 euros– una cantidad que Málaga Ahora le había solicitado su devolución por la vía civil.

La portavoz de Málaga Ahora, Ysabel Torralbo, está citada a declarar como testigo el día 8 de octubre, como ha podido conocer este periódico. La situación judicial de Espinosa se complica. Podemos, cuyo secretario provincial Alberto Montero, pidió dejarle sin cargos orgánicos en el partido, lo que se hizo de forma cautelar en julio, no dio más pistas sobre qué medidas tomarían con el edil no adscrito –aunque bajo el paraguas de este partido– si continúa el proceso judicial contra él por los presuntos delitos de la gravedad que describe la Fiscalía de Málaga.