Una investigación de la UMA y Sando medirá en Málaga los beneficios de los árboles
Una serie de sensores instalados en las zonas verdes de la capital permitirán conocer su impacto real sobre la contaminación
Las zonas verdes y, en particular, los árboles, tienen numerosos beneficios ambientales y ecológicos para las ciudades. Pero, ¿es posible medir cómo impactan realmente sobre ... la contaminación atmosférica, el cambio climático y el confort ambiental de los barrios? Ese es el reto que se han propuesto Sando (a través de su filial Althenia) y Enrique Salvo, profesor e investigador de la Universidad de Málaga (UMA), que están inmersos en un proyecto científico para desarrollar un sistema tecnológico que permita medir su beneficios económicos, sociales y medioambientales.
El proyecto Serveco, financiado por la Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), está destinado a la evaluación de los servicios ecosistémicos proporcionados por los árboles en Málaga, y cuenta con la participación del Gabinete de Estudios del Ecosistema urbano del grupo de investigación de Biogeografía, Diversidad y Conservación de la UMA.
El responsable técnico del sector Edificación y Obra Civil de CTA, Carlos García, señala como principal valor del proyecto que permitirá a las administraciones, sobre todo a los ayuntamientos, contar con una herramienta para demostrar los beneficios ambientales y la sostenibilidad de sus actuaciones e intervenciones en las zonas verdes.
Valorizar los ecosistemas
Los resultados de su aplicación permitirán confirmar la idoneidad de los trabajos, reforzar su imagen corporativa y facilitar la captación de financiación, especialmente la europea, para lo que es un requisito en el actual Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El proyecto está destinado a administraciones públicas, fundamentalmente a ayuntamientos y diputaciones.
El responsable de Innovación de Sando, Juan Antonio Báez, añade que gracias al apoyo de CTA se ha logrado impulsar un proyecto «que nos permitirá contar con información detallada del impacto de las zonas verdes en las ciudades». En cuanto a las motivaciones de esta iniciativa, explica: «Llevamos más de una década desarrollando investigaciones con diferentes sensores, y gracias a ellas solucionamos de manera innovadora las necesidades de nuestros clientes», en materias como construcción sostenible, conservación de infraestructuras, materiales innovadores y reciclados y gestión medioambiental, entre otros. Para ello, se emplean nuevas tecnologías como la inteligencia artificial (IA), los gemelos digitales, el modelado de información de construcción (BIM), la robótica, etc. «Este proyecto contribuirá a ser más respetuosos con el medio ambiente en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible».
Enrique Salvo, botánico, investigador de la UMA y director de dos cátedras relacionadas con el cambio climático y la conservación de la naturaleza, destaca que la utilización de técnicas telemáticas avanzadas permitirá «valorizar los servicios ecosistémicos que nos proveen las zonas verdes en la ciudad, y muy especialmente el arbolado urbano, en unos momentos en que se pone de manifiesto el papel trascendental que tienen en la adaptación y mitigación del calentamiento y de la isla de calor urbana».
El proyecto Serveco empleará técnicas de teledetección y sensores de campo, con el objetivo de desarrollar una metodología para la valorización y fomento de los servicios ecosistémicos del arbolado urbano. Las nuevas tecnologías permitirán promover que este pueda crear mejores condiciones ambientales que incrementen la calidad de vida de una ciudad.
Comparativa por barrios
La validación se realizará en zonas clave del municipio de Málaga: barrios con buena cobertura forestal; con cobertura forestal deficiente y sin cobertura. Se recogerán datos de variables ambientales a pie de calle en diferentes estaciones del año en las horas de mayor incidencia solar y se capturará información con técnicas de teledetección, obteniendo tanto nubes de puntos como imágenes de alta resolución, para complementar y comparar la información derivada de los sensores.
El sistema permitirá validar la influencia que ejerce la silvicultura urbana en la contaminación atmosférica, el cambio climático y en general en la mejora del confort ambiental, según informan fuentes de Sando. De esta forma, se contribuirá a conservar y promover este confort ambiental para hacer de las ciudades lugares más habitables. Además, se pretende proporcionar una nueva estrategia para adaptarlas al nuevo escenario de crisis climática y ecológica, que amenaza la habitabilidad de los entornos urbanos.
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