Google Maps te lleva directo a la multa: no recoge los itinerarios restringidos en Málaga

Este periódico empezó por hacer la prueba de situarse en el entorno de Atarazanas y pedirle al navegador que nos lleve al parking de Tejón y Rodríguez. Lo correcto desde ahí sería llegar a la Goleta, entrar en Ollerías, bordear la manzana de la librería Proteo y bajar al recinto municipal. Pero no. Google marcaba insistentemente la entrada por Carretería. Ignoramos el consejo porque sabemos que está vetado. Y el siguiente giro a la derecha que nos recomienda es por Postigo de Arance, de nuevo prohibido porque lleva inexorablemente a Carretería.

Experimentos similares los hemos realizado en lugares como la calle Martínez desde Puerta del Mar o el acceso desde la Avenida de Andalucía a la Alameda (sólo para bus, taxi y autorizados, los demás por Alameda de Colón). Incluso lugares que llevan años sin acceso libre como el giro desde Pasillo de Santa Isabel hacia la Plaza de la Constitución o el giro desde detrás del Ayuntamiento y el Rectorado hacia Pintor Nogales y Císter. Eso sí, el dispositivo tiene a bien advertir que el aparcamiento en esta última esta complicado. Lo hace con un trazado rojo.

Sin embargo, todos los radares urbanos están avisados convenientemente. Y también el giro a la derecha desde la calle Córdoba, el principal punto 'cazaturistas' de la ciudad de Málaga según explica Ana María García, responsable de Aesva, la Asociación de Empresas de Servicios de Vehículos de Alquiler. La zona azul es el segundo motivo habitual de multas en el sector. Sin embargo, a pesar de que en los dos primeros meses de funcionamiento del eje Álamos-Carretería las cámaras municipales han registrado 9.100 infracciones, aún no les han llegado a los 'rent a car'. «A veces tardan dos o tres meses en llegar», explica, al tiempo que reconoce que las zonas restringidas están muy señalizadas. Y, en efecto, los vistosos carteles amarillos fluorescentes con una cámara dibujada son bastante evidentes. Eso y que circular por el centro de las ciudades cuando uno viaja siempre debe poner en guardia al conductor habida cuenta de las nuevas tendencias y marcos normativos.

Esta empresaria añade que el sector ha trasladado al Ayuntamiento en el marco del Foro de Turismo que realice esas comunicaciones a Google. ¿Y qué responden desde la empresa? Una portavoz explica: «Utilizamos varias fuentes para actualizar el mapa, incluidos datos de terceros, información de autoridades locales, contribuciones de la comunidad de Google Maps, además de imágenes satelitales y de Street View. También ofrecemos a los gobiernos locales la posibilidad de enviar sus datos a Google Maps a través de nuestra herramienta Maps Content Partners».

El siguiente paso es preguntar al Consistorio. Y la respuesta es que sus informáticos están trabajando para reportar los datos de Movilidad y EMT. Y recalcan que todos los datos están online y abiertos. El hecho de que Maps ya incluya a los autobuses urbanos es por iniciativa de la tecnológica. De hecho, la idea es reportar para que estos itinerarios vetados ni siquiera se ofrezcan con advertencia, sino que sean considerados directamente como peatonales.

Es extraño, por lo tanto, que con el Big Data y la facilidad para conseguir información en tiempo real Maps no suba cambios tan importantes cuando, por ejemplo, la información sobre la fluidez del tráfico, las obras y los atascos es inmediata.