Tres chiringuitos de La Malagueta serán renovados con nuevas instalaciones de obra

La primera de estas obras en ponerse en marcha va a ser la construcción de nuevo chiringuito Sicsu, que ha renovado su concesión ante la delegación de la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente. Sus actuales instalaciones van a ser derribadas y este negocio se ubicará en un edificio de nueva construcción situado más hacia el oeste de su actual emplazamiento. De este modo, mantendrá una distancia de 150 metros con Antonio Martín, que es la longitud mínima que exige la normativa de Costas para la separación de chiringuitos en las playas urbanas.

Al guardar esa separación, se facilita que pueda otorgarse una nueva concesión en el espacio que actualmente ocupa Antonio Martín. Como ha informado SUR en los últimos días, Costas ha vuelto a dictaminar que al menos el 80% de ese histórico restaurante tiene que ser derribado para respetar la superficie máxima legal permitida en las playas para este tipo de establecimientos. En concreto, no pueden tener más de 270 de metros cuadrados de zona de hostelería y 30 metros cuadrados de aseos. En cambio, Antonio Martín ocupa una superficie de 1.524 metros cuadrados tras las sucesivas ampliaciones a las que se ha visto sometido en las últimas décadas. Además, Costas ha recordado a la Junta que, en el caso de querer tramitar una nueva concesión en ese enclave (una sentencia firme determinó hace cinco años que estaba extinguida), tiene que hacerlo mediante un concurso público.

En el caso del chiringuito Sicsu, la concesión ha sido renovada recientemente, en el año 2022, por un plazo de 15 años prorrogables por el mismo periodo. El pasado mes de marzo, la Gerencia Municipal de Urbanismo concedió la licencia de obras para la construcción del nuevo edificio que albergará este local, con diseño del arquitecto Francisco Javier Martínez Membrilla. Según ha podido conocer SUR, está previsto que en los próximos días comiencen las obras de este restaurante, que ocupará una superficie de 286 metros cuadrados. De ellos, la edificación principal para cocina, barra, terraza cubierta y aseos ocupará 216 metros cuadrados. A esto se añadirá una terraza abierta y desmontable de 70 metros cuadrados.

Una de las características más singulares del nuevo restaurante, que tendrá acristalada una gran parte de su fachada, es la forma ondulada que presentará su cubierta, inspirada en el movimiento del mar. La nueva construcción tendrá una altura de 4,10 metros desde la superficie de la arena y una longitud de 24 metros en paralelo al paseo marítimo. En total, el proyecto supone una inversión de 238.130 euros, incluidas las obras, los honorarios técnicos y el equipamiento del local. Según el estudio económico para esta actuación, esto se amortizará a lo largo de los 30 años de concesión otorgados por la Junta.

No obstante, este no va a ser el único chiringuito de La Malagueta que va a renovarse por completo. También el que lleva el nombre de esta playa de la capital, perteneciente a miembros de la misma familia propietaria del Sicsu, va a experimentar en los próximos meses una transformación similar, igualmente con diseño del arquitecto, Francisco Javier Martínez Membrilla, aunque en ese caso sin cambiar de ubicación. El chiringuito La Malagueta, que también ha actualizado su concesión en los últimos años, tendrá un aspecto semejante al nuevo Sicsu, con la salvedad de que será una instalación desmontable, con una cimentación a base de troncos que se introducen en la arena y no por zapata.

Asimismo, a la reconstrucción de estos dos chiringuitos, se sumará la del denominado Mami Beach, ubicado en el paseo de Matías Prats, frente al edificio de la residencia militar. También el arquitecto Francisco Javier Martínez Membrilla es el autor de este proyecto. En este caso será una instalación permanente para la que la Junta ha otorgado una nueva concesión de 15 años prorrogables.