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Basura y plásticos en los aledaños del CAC y Martiricos

La acumulación de basura y plásticos en zonas emblemáticas de Málaga se ha convertido en una preocupante constante para quienes aún defienden el valor de los espacios públicos. Uno de los puntos más afectados es el entorno del Puente de la Misericordia, junto al antiguo CAC, donde a diario se observan bolsas, botellas, latas y todo tipo de residuos apilados bajo el puente o flotando en el cauce del río. Un espacio que alguna vez simbolizó conexión y cultura, ahora transmite abandono.

Una situación igual de preocupante se repite en el parque de Martiricos, especialmente en la zona del lago artificial. Lo que debería ser un pulmón verde para el barrio, un lugar de encuentro familiar y de contacto con la naturaleza, se ha convertido en un punto negro de acumulación de basura. Plásticos en el agua, latas entre los arbustos y restos de comida rodean una zona que, en teoría, debería inspirar tranquilidad.

Aunque existe mantenimiento municipal, la falta de civismo de parte de la ciudadanía agrava el problema. «Por muchas papeleras que pongas, si la gente no quiere cuidar lo que tiene, no hay servicio de limpieza que aguante».

El impacto también afecta directamente a la flora y la fauna: peces muertos en el lago, aves que se alimentan de restos contaminantes y vegetación dañada por el uso irresponsable del entorno, además de basura. La ciudad pide más parques, pero la realidad es que muchas personas no están preparadas para conservar lo que se les da.

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