El Ayuntamiento de Málaga amplía en 60 plazas la infraestructura para personas sin hogar
El estado de alarma y el toque de queda entre las once de la noche y las seis de la mañana aumenta la vulnerabilidad de más de un centenar de 'sin techo'
La declaración del estado de alarma y la aplicación general del toque de queda entre las once de la noche y las seis de la ... mañana para frenar el avance del coronavirus ha vuelto a poner sobre la mesa, por segunda vez desde marzo, la realidad de uno de los colectivos más vulnerables de la ya de por sí debilitada pirámide social: son las personas sin hogar, que desde el domingo por la noche suman a sus dificultades cotidianas la prohibición expresa de estar en la calle en ese tramo horario.
En esa situación de extrema vulnerabilidad se encuentran entre 125 y 150 personas en la capital, una cifra que escaló hasta las 175 en los periodos más rígidos del confinamiento porque a pesar de que se pusieron en marcha recursos específicos de acogida, el cierre de las pensiones –una alternativa económica para muchos de ellos– y de los refugios a los que tradicionalmente recurren los dejó en una situación crítica.
En este nuevo contexto de restricciones, las administraciones ya se han puesto en marcha para dar una respuesta a esas cerca de 150 personas que con el toque de queda no tienen a dónde ir. Es el caso del Ayuntamiento de Málaga, que a través del Área de Derechos Sociales ha habilitado en el albergue municipal un área específica para dar cobijo a unas 60 personas durante la noche. Según confirmaba ayer a SUR el concejal responsable, Francisco Pomares, se trata de «una zona anexa al albergue que normalmente los usuarios utilizan como centro de día y que desde ya comienza a funcionar por las noches para dar refugio a los 'sin techo'». En ese nuevo espacio, que ya ha sido habilitado en anteriores ocasiones ante situaciones extraordinarias como olas de frío, las personas sin hogar podrán pasar la noche, previa realización del correspondiente test rápido que confirme que está libre de Covid.
Hay que tener en cuenta que, en la actualidad, el único recurso de emergencia con el que cuenta este colectivo para no pasar la noche al raso es el 'Calor y Café' de Cáritas, que por las restricciones derivadas de la pandemia ha tenido que recortar sus plazas diarias de las 20 o 25 de la antigua normalidad a las 17 de ahora (11 para hombres y 6 para mujeres). La capital también cuenta con otros espacios como el propio albergue municipal (éste con 96 plazas), el Hogar de Pozos Dulces o el centro de acogida San Juan de Dios, entre otros, pero la diferencia es que en estos casos las plazas ya están previamente asignadas a los usuarios que han sido derivados a través de la Puerta Única de los Servicios Sociales.
Con la inminente entrada en servicio de esta nueva infraestructura de apoyo a 'Calor y Café', las unidades de puerta única y de emergencia social del Ayuntamiento se centrarán en estos días en informar a las personas sin hogar de las alternativas para cumplir con el toque de queda y, en paralelo, salir de ese confinamiento a la inversa al que les obliga la calle.
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