Las aspiraciones de acabar la Catedral de Málaga deben salvar varios informes negativos
Los técnicos de la Consejería de Cultura han insistido hasta ahora en rechazar la finalización de las obras del templo y priorizar su restauración
La declaración de intenciones del consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, de favorecer las aspiraciones de la Asociación Ciudadana Málaga por su Catedral para ... que se finalicen las obras del templo y , de este modo, se ponga remedio al problema de filtraciones que padece, ha sido muy bien recibida por quienes defienden que la basílica debe completarse tal y como quedó proyectada en sus planos del siglo XVIII. Así lo sostiene el Obispado, que a finales de 2016 presentó ante la Consejería de Cultura un plan director que contempla un tejado a dos aguas, una sacristía que ocuparía parte de los jardines hacia la calle Císter, otra más pequeña hacia la calle Postigo de los Abades, la culminación de los torreones que enmarcan las portadas del crucero, la balaustrada con imágenes de santos que remataría sus fachadas y el campanario sur del que adolece el templo.
La Asociación Ciudadana Málaga por su Catedral envió una carta a Bendodo en la que le pedía su apoyo para impulsar la finalización de las obras del templo, cuestión que también defiende mediante un procedimiento judicial abierto contra la Gerencia Municipal de Urbanismo y en el que se ha personado la Consejería de Cultura. Como ayer avanzó SUR, la respuesta del consejero de la Presidencia ha sido trasladar la inquietud de este colectivo tanto a la Delegación del Gobierno de Málaga como a la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico «para que aborden lo que nos plantea», señala la misiva de Bendodo a la asociación, en la que añade que «nuestro patrimonio histórico es uno de nuestros principales valores y debemos fijarlo como eje prioritario para dar más fuerza si cabe a nuestro potencial cultural y turístico».
No obstante, este propósito debe salvar los informes que hasta ahora han emitido los técnicos de la Consejería de Cultura y en los que han puesto de manifiesto sus dudas y rechazo a que acabar las obras de la Catedral, en especial en lo relativo a realizarle una cubierta, pueda realmente poner remedio definitivo a sus goteras. Estos pronunciamientos técnicos respecto al contenido del plan director que presentó elObispado hace tres años fueron evacuados por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, la delegación provincial de Cultura y una arqueóloga de este departamento autonómico.
Como recordó a finales del mes pasado la defensa de la consejería en su escrito de súplica al Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Málaga, para rechazar el recurso de la Asociación Málaga por su Catedral, del contenido de estos informes «no se deduce autorización para ejecución de obras de ningún tipo sino, por el contrario, la necesidad de corregir el documento –el plan director elaborado por la Iglesia– para priorizar la conservación antes de que la reconstrucción» del templo.
Arqueóloga
De esos informes, uno no conocido hasta ahora es el que elaboró en junio de 2017 una arqueóloga de la delegación provincial de Cultura que fue significativamente tajante al afirmar que «aunque es evidente el estado inacabado de la Catedral, no lo es tanto que ese sea el origen de sus patologías». Además, llegó a aseverar que «no parece haberse valorado el simbolismo de la imagen inacabada de la Catedral de Málaga o la peculiaridad de su cubierta». «Estos son rasgos distintivos y propios que la definen, la hacen única y le otorgan singularidad, y que han acabado formando parte del acervo cultural de la ciudad». En la medida en que pueda variar el sentido de estos dictámenes técnicos podrá prosperar o no el deseo del Obispado y de la Asociación Málaga por su Catedral para concluir las obras del primer templo de la diócesis, un anhelo favorecido, eso sí, por el cambio político en la Junta.
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