Gestrisam activa el embargo de los bienes de la promotora del hotel de Moneo

De este modo, sin aplazamiento en vigor de por medio, se activa de inmediato el embargo que, de un modo preventivo, ya pesaba sobre los suelos en los que está planificada esta operación urbanística. Así, a no ser que Braser II llegue pronto a un acuerdo con Urbanismo para saldar su deuda, lo que daría pie a retomar los permisos de obra que fueron bloqueados por los grupos políticos de la oposición el pasado mes de julio, Gestión Tributaria avanzará en las gestiones para seguir investigando los bienes de cada uno de los socios que forman parte de la promotora ya que, al ser una unión temporal de empresas, carece de patrimonio propio. Entre esos bienes se encuentra el suelo de Hoyo de Esparteros. Llegado el caso, el Ayuntamiento podría llevar a cabo la subasta forzosa del espacio para intentar cobrar la deuda, pero esta operación se antoja complicada porque las parcelas tienen una carga hipotecaria de más de tres millones de euros que tendrían que descontarse del dinero que el municipio pudiera obtener de esta venta. Además, habría que analizar antes si el valor del suelo cubriría o no la totalidad del débito.

Fuentes de Braser II restaron importancia a los efectos que podría tener por el momento este embargo y confiaron en llegar en próximas fechas a un acuerdo con la Gerencia de Urbanismo para reformular las condiciones del pago de los 6,3 millones de euros, incluidos el recargo y los intereses de demora hasta la fecha.

Nuevas fórmulas

En ese sentido, la promotora propuso al Consistorio abonar una parte en metálico y otra en especie, entregando a la ciudad el edificio de oficinas que reproducirá la fachada de La Mundial en el vértice de la futura plaza del nuevo Hoyo de Esparteros. Incluso propuso aportar un aval para que el Ayuntamiento tuviera garantizado el cobro de la cantidad en la que se valorara este inmueble si no se llegara a construir en un determinado plazo. Sin embargo, según indicaron las fuentes, este último ofrecimiento también genera dudas en Urbanismo, por lo que las conversaciones entre la empresa y la Gerencia giran actualmente sobre la posibilidad de que se pueda pactar en una adenda al convenio un fraccionamiento de la deuda en varios pagos, a lo largo de la construcción del proyecto.

En el caso de llegar a un acuerdo en este sentido, que en todo caso tendría que contar con un aval o garantía económica por parte de Braser II, el siguiente paso sería convencer a los grupos de la oposición, especialmente a Ciudadanos, de que desbloquearán los trámites para permitir el inicio de las obras del proyecto que quedaron paralizados en julio del año pasado, un decisión del consejo rector de Urbanismo que la promotora tiene recurrida en los tribunales.