Bruselas recibe la garantía de Ankara de que mantendrá el pacto migratorio

«Ya no estamos en disposición de retenerlos», aseguraba en las últimas horas un portavoz del partido islamista Justicia y Desarrollo (AKP), al que pertenece el presidente Tayyip Erdogan. El mensaje, la amenaza en definitiva, ha sido respondida con cautela este viernes por la Comisión Europea.

De momento, el Ejecutivo comunitario se ajusta a la versión oficial del Gobierno turco. Y ésta no ha cambiado. «No se ha producido ninguna modificación en la política de refugiados de Turquía», ha asegurado el portavoz Peter Stano, durante la conferencia de prensa diaria que se ofrece desde la Comisión Europea.

«No se ha comunicado ninguna modificación», ha insistido en varias ocasiones, pese a que en las últimas horas se han difundido imágenes de alrededor de 300 personas (sirios, iraníes, paquistaníes y marroquíes) que se dirigían a la frontera turca con intención de proseguir su viaje hacia Grecia y Bulgaria. «El acuerdo con Turquía continúa en vigor. No hay que sacar conclusiones prematuras. Estamos haciendo todo lo necesario y seguimos atentamente el desarrollo de acontecimientos en coordinación con los Estados miembros».

Si se trata o no de un intento de coacción por parte de Ankara, está por ver, viene a decir Bruselas. De momento se cree la versión oficial. Y, en consecuencia, no hay variaciones en el acuerdo que se suscribió en 2016, tras la crisis migratoria que vivió la UE, y que inyecta en torno a 6.000 millones de euros a Turquía a modo de contraprestación por mantener el compromiso de retener los flujos migratorios irregulares. «Se trata de ayuda vital a los refugiados y comunidades de acogida en Turquía, no es dinero para el Gobierno turco», se precisa.

El jefe de la diplomacia europea, el español Josep Borrell, ha asegurado tras mantener una conversación telefónica con el ministro de Asuntos Exteriores turco Mevlüt Çavuşoğlu, que ha recibido «la seguridad de que Turquía sigue comprometida con la Declaración Conjunta UE-Turquía». Borrell, a través de su cuenta oficial de Twitter, subraya asimismo que «la desescalada sigue siendo clave para abordar eficazmente los desafíos sobre el terreno. El sufrimiento humano y la pérdida de vidas deben detenerse».

Con todo, Grecia ya ha comunicado a la Comisión Europea que tiene intención de reforzar su frontera exterior ante un posible incremento de entradas desde el territorio turco. Medida que respalda Bruselas, que pese al mensaje oficial también deja entrever que no descarta un cambio en la situación en las próximas horas o días.

Si Turquía llegara a cumplir con su amenaza, la Unión Europea estaría «mejor preparada que en el pasado» para responder de forma adecuada a los intentos irregulares de entrada. Los refuerzos se seguridad en las fronteras terrestres y marítimas son dos de las medidas que se han recordado esta mañana como parte de los «grandes avances» que ha experimentado el territorio comunitario en los últimos cinco años.