Arriate recuperará uno de los senderos fluviales de mayor valor paisajístico y natural de la provincia

El vicepresidente cuarto y diputado de Medio Ambiente, Turismo Interior, Cambio Climático y Deportes, Cristóbal Ortega, destaca el compromiso de la Diputación para contribuir a la puesta en valor de espacios naturales de la provincia.

En este caso, Ortega explica que la institución provincial ha concedido al Ayuntamiento de Arriate una subvención de 61.848,11 euros para diversas actuaciones en el sendero, que se encuentra deteriorado. En este sentido, se contempla el desbroce manual selectivo y el perfilado manual de unos dos kilómetros de longitud del camino, con una anchura media de un metro.

Además, una vez recuperada la vereda, se prevé su señalización mediante la instalación de 40 balizas y una docena de señales informativas. Así mismo, se procederá a la colocación de unos 200 metros de vallas de madera para protección de los senderistas.

La garganta del Arroyo de la Ventilla, un cañón de más de cinco kilómetros de longitud y alturas superiores al centenar de metros, es una joya geológica donde florece uno de los bosques en galería más importantes de Málaga. La vegetación existente en esta zona es la típica de ribera, cuyos elementos arbóreos son especies asociadas del bosque atlántico aunque se encuentren dentro de un ambiente mediterráneo. La vegetación más representativa de la zona está formada por olmos, chopos, sauces y fresnos en la zona más baja y encinas y quejigos en la zona más alta del arroyo.

Además, en la garganta del arroyo de la Ventilla existe una gran diversidad de avifauna durante todo el año, como el búho real, además de cárabos, lechuzas comunes, cernícalos comunes, ratoneros, mitos, oropéndolas o el martín pescador. Entre los mamíferos destacan el zorro, la gineta, el tejón o la comadreja, así como una importante representación de anfibios, reptiles, arácnidos, moluscos y truchas en el medio acuático.

En este entorno de gran valor ambiental, la Diputación de Málaga instaló en 2017 un observatorio para el avistamiento de aves, situado en la parte alta del arroyo, y que permite divisar las especies que habitan en ese ecosistema. Igualmente, las amplias vistas del emplazamiento posibilitan contemplar las águilas culebrera y calzada que nidifican en el entorno.

El observatorio cuenta también con una mesa interpretativa del paisaje, y desde él se observa toda la garganta fluvial además de las sierras que rodean este sector de la meseta rondeña, como Sierra Blanquilla, Sierra de Líbar y Sierra del Endrinal.