Le devuelven la cartera con 900 euros de su pensión, tras perderla al comprar pan en Antequera
El hombre de 75 años no se percató hasta que la dependienta del puesto de pan de Santiago se la llevó a su casa
Tomás, un jubilado de 75 años, fue a comprar el pan como cada día a la Panadería Santiago del Barrio Girón, pero esta vez se ... dejó olvidada la cartera con los 900 euros de la pensión recién cobrada del banco. Horas más tarde, la dependienta que le atendió, encontró una cartera abandonada en el mostrador de la panadería. Miró dentro, donde encontró el DNI del hombre que había comprado pan por la mañana junto a una gran cantidad de dinero y decidió devolvérsela a su casa, donde el pensionista se percató que la había perdido esa mañana.
Un final feliz en la vida de Tomás González Muñoz, quien tiene 75 años y, tras jubilarse después de una vida dedicada a la hostelería y la construcción, tiene en las compras su día a día de mandados en su casa. «Yo fui a comprar el pan y lo que hacía falta ese día». Tras dárselas puso la compra «en lo alto del mostrador con la cartera, pero como era poco, lo pagué con unas monedas que tenía». Seguidamente «pillé la bolsa con la compra y me olvidé la cartera en el mostrador sin darme cuenta». Era hora punta y los clientes van y vienen, entrando y saliendo pan y gente en el lugar. Le atendió Rosario Fernández Guerrero, quien comparte: «Él llegó a comprar su mandados y pagó. Yo no me di cuenta que dejó la cartera». Pasaron varios clientes «y una mujer vino y me avisó que había una cartera, la miré y vi que tenía mucho dinero. Cuando mi marido vino, la abrimos y vimos el carnet». Ahí empezó la buena acción con final feliz.
La alegría de Tomás
La cartera era de Tomás que había estado dos veces en la tienda esa mañana. «Decidimos ir a su casa y mi marido le preguntó si se le había perdido algo. Puso la mano en los bolsillos y dijo: 'Las llaves las tengo aquí'... pero no se había dado cuenta aún que la faltaba la cartera».
Cuando se la enseñaron se echó las manos a la cabeza y «me puse muy contento, le di un millón de gracias, yo no me había dado cuenta». Aún no se lo cree porque cobra 1.000 euros, y suele dejar 100 en la cuenta y el resto los saca para los gastos del mes. Si no se la llegan a entregar no quiere pensar cómo podría haber echado el mes.
Tomás había sacado su pensión y dejó el dinero por descuido en la cartera y Rosario al localizarla no dudó en devolverla. «A Rosario, no sé cómo puedo darle las gracias. Yo estoy muy agradecido a ella, hay muy poquillas personas que sean así. Me dio una sorpresa muy bonita».
Y Rosario le dice a Tomás y aconseja a todas las personas mayores. «Que gaste más cuidado con la cartera, que los dineros son muy golosos...». Es la historia con final feliz de Tomás y Rosario. Una práctica de muchos pensionistas que optan por sacar la mayoría de la pensión y pagar en mano los gastos del mes. Tomás no olvidará el buen gesto de Rosario.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión