Antequera vive su día grande de Semana Santa con tres cofradías y nueve tronos

El día grande de la Semana Santa en Antequera es el Viernes Santo. Por la mañana, visitas multitudinarias a las iglesias para ver los tronos con detalle. Así se hizo en Santo Domingo para los de la cofradía de 'Abajo', en Santa María de Jesús para los de 'Arriba' y en el Carmen para los de la Soledad.

A mediodía, los bares llenos y reuniones de familias y amigos que tras Navidad, quedan al menos en Semana Santa este día. Luego, participación en los oficios y salida para ver las procesiones.

Primero salieron los de 'Abajo' y los de 'Arriba', bajando desde sus cuestas hasta el centro de la ciudad. Los de Santo Domingo cuentan con cuatro tronos: el Niño Jesús Perdido, Dulce Nombre de Jesús, Cristo de la Buena Muerte y de la Paz y la Virgen de la Paz Coronada.

Contaron con el acompañamiento musical de la Agrupación Musical «Nuestra Señora de Gracia» de Archidona, que destacó por su buena interpretación y la Banda Municipal «Amantes de la Música» de Campillos.

Tras ellos, los de 'Arriba' que estrenaron la primera fase de mejora del trono del Nazareno, siendo redorada por Cristina González Carbonero de Artekira. Y a última hora, también se estrenó corona. Se recuperó la que se encargó en 1781 al platero Diego Ruiz González, de plata dorada.

Procesionaron tres tronos: la Cruz de Jerusalén, el Nazareno y la Virgen del Socorro Coronada, la imagen mariana que más acompañamiento de alumbrado cuenta en la ciudad. Musicalmente, abrió el cortejo la Escuadra de Gastadores, Banderines, Guiones, Banda de Guerra (Nuba) y Piquete de honores del Grupo de Regulares número 52 de Melilla; la Banda de Cornetas y Tambores «Dolores Coronada» de Álora y la Banda de Música «Villa de Otura».

Tras hacer su recorrido por el centro, tras diez años, se volvieron a encontrar antes de subir las cuestas, la Virgen de la Paz y del Socorro en la plaza de San Sebastián. La lluvia, la pandemia y la falta de acuerdo entre anteriores directivas, habían privado este momento donde ambos palios se encaran y saludan antes de «correr las vegas», cada vez con más gente en las cuestas.

Un Viernes Santo que cerró la Cofradía del Santo Entierro con las luces apagadas de las calles desde el barroco templo del Carmen. La increíble urna del Cristo Yacente y la Virgen de la Soledad forman parte de esta cofradía con orígenes en 1520.

La capilla volcal 'Lux Aeterna' ambientó el paso con cánticos y misereres en latín y la musical 'Ars Sacra' el paso de la Virgen que cerró la madrugada del día grande de la Semana Santa.

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