De estudiante en Almargen a emprendedor en Suiza

Sin embargo, para Ángel Romero no fue fácil llegar a Zúrich y estuvo a punto de tener que quedarse en Málaga. «Intenté solicitar todo tipo de becas en España, tanto públicas como privadas, pero no recibí ninguna, sólo quedaba un préstamo o no aprovechar la oportunidad que se me estaba dando», relata. Sabiendo que de renunciar se arrepentiría siempre, lo habló con sus padres y comenzaron a visitar distintas entidades bancarias buscando un préstamo para estudiantes. «Casi ninguna entidad bancaria me concedió el préstamo, pero justo al final una de ellas accedió, recuerdo cómo el día antes de coger el vuelo iba con mis padres al notario», explica. Al llegar a Zúrich se sorprendió al ver que en su prestigiosa universidad hay muchos españoles:«A veces piensas qué sería de España si a todos estos estudiantes brillantes se les hubieran ofrecido las mismas oportunidades y recursos que se ofrecen aquí».

Idea sencilla

En noviembre de 2015 decidieron poner en marcha el proyecto emprendedor a partir de una idea que califica de sencilla. «Cuando circulas en bicicleta por la ciudad, ves que el resto de vehículos son capaces de indicar sus intenciones con luces de freno, con intermitentes. Pero los ciclistas no tenemos esa capacidad y esto nos hace vulnerables, sobre todo cuando en muchas zonas ya se nos obliga a circular por la carretera», afirma. La idea fue de uno de los miembros del equipo e inmediatamente se pusieron a trabajar impulsados por una afición ciclista común. «Yo me considero un usuario bastante frecuente de bicicleta. De hecho, aquí en Zúrich tengo dos, en cuanto sale el sol dejo de usar transporte público y me paso a las dos ruedas, pero además casi cada fin de semana soleado organizamos una ruta por los impresionantes paisajes suizos», apunta Romero.

Con sus cuatro compañeros de equipo tiene como nexo en común la Universidad, ya que dos son de Tarragona, uno de Pamplona y otro de Vitoria: «Uno de los miembros de la compañía (Toni) estudia el mismo máster que yo, los demás estudian gestión de empresas e ingeniería mecánica en la misma universidad: ETH. Y es esta misma universidad la que nos ha ofrecido el ambiente perfecto para que pasemos de una mera idea a la realidad que estamos viviendo ahora».

A través de Velohub pretenden evitar 500.000 accidentes ciclistas. 2.000 ciclistas mueren en la Unión Europea al año, más del 70% en rotondas e intersecciones, aspecto fuerte de Blinker, que es visible desde todos los ángulos. El 23 de mayo lanzan una campaña de crowdfunding a través de la plataforma Kickstarter para seguir creciendo.