Kate Middleton acaba el tratamiento de quimioterapia

«El trayecto del cáncer es complejo, temible e impredecible para todos, especialmente para quienes son los más próximos», afirma. «Con humildad, te lleva a encarar tu propia vulnerabilidad, de un modo que nunca habías considerado antes, y con ello una nueva perspectiva en todas las cosas». Y añade: «Este tiempo nos ha recordado sobre todo, a Guillermo y a mí, que debemos reflexionar y ser agradecidos por las cosas simples y, sin embargo importantes, de la vida, que tantos de nosotros las considerados a menudo garantizadas. O simplemente amando y siendo amados».

La princesa, que anunció en marzo que padecía cáncer y estaba siendo sometida a un tratamiento de quimioterapia preventiva, anuncia que participará en más eventos públicos en los próximos meses «con un renovado sentimiento de esperanza y aprecio por la vida». Agradece en nombre de la pareja su agradecimiento por los múltiples mensajes de apoyo y simpatía que han recibido, antes de culminar sus palabras con un mensaje a quienes padezcan cáncer: «Sigo contigo, juntos, de la mano. De la oscuridad puede llegar la luz, así que deja hagamos que esa luz brille».

No había noticias de la evolución de Kate Middleton desde junio, cuando al cumplir cinco meses de su enfermedad anunció en un comunicado que estaba haciendo «buenos progresos» de su enfermedad, por lo que acudiría a mitad de mes al desfile del Cumpleaños del Rey. Se convirtió en su primera aparición desde que acudiera el 25 de diciembre a la misa de Navidad después de tener que cancelar en enero su agenda.

Una interrupción que durante dos meses se justificó por una operación abdominal de la que poca información trascendió, más allá de que la Princesa permanecería ingresada entre «10 y 14 días». Pero tras semanas de especulaciones sobre su salud, e incluso sobre las debilidades de su matrimonio con Guillermo, el palacio de Kedsington lanzó un video en el que la Princesa contaba el tratamiento que estaba recibiendo. Todo en un momento en el que la familia real británica también estaba pendiente de la evolución del cáncer del que está siendo tratado el rey Carlos III.