Un guapo con causa

«Mucha gente piensa que este tipo de certámenes, que suelen enseñar cuerpos perfectos, son algo dañinos en la era del 'body positive', pero lo que se evalúa es una personalidad con valores», ha precisado el joven aspirante. Aunque nunca se ha sentido víctima del racismo, Keita es consciente de que el mundo no gira solo en torno a su realidad y se ha implicado en el movimiento 'Black Lives Matter'. «Que yo no lo haya vivido no quiere decir que no exista», puntualiza. Y como opina que la discriminación racial tiene mucho que ver con el «desconocimiento», está convencido de que darse a conocer incrementará la visibilidad de los afrodescendientes y significará un paso adelante hacia la aceptación de la diversidad.

Nacido en la tarraconense Tortosa, capital comarcal del Bajo Ebro, hijo de inmigrantes procedentes de Mali, Sada Keita Cisse fue descubierto, para su sorpresa, en Instagram entre miles de modelos y el año pasado dio un salto cualitativo importante al protagonizar la campaña 'gayfriendly' de la firma de alta cosmética masculina 'Yag Men'. Su impactante rostro se asomó a cientos de marquesinas coronándolo como «el nuevo talento español de la publicidad». Así lo definía la revista 'Loev Magazine' cuando el pasado octubre lo llevó a su portada por considerarlo el digno sucesor de la saga de modelos españoles con proyección internacional como Jon Kortajarena, Andrés Velencoso y Oriol Elcacho.

«Keita Evans tiene todas las condiciones para convertirse en un icono de la publicidad a nivel internacional-afirmaba la revista-. Pero además, quien ya ha trabajado con él asegura que posee un halo único de efecto hipnótico que le hará llegar muy lejos en su carrera como modelo». De carácter «sosegado, muy afable, educado, sencillo y con valores familiares» a Keita se le define como «un gran luchador» que tiene muy claros sus objetivos. «Personalmente -declaraba por entonces el joven modelo- el hecho de ser auténtico es uno de los aspectos que más valoro en nuestra sociedad de hoy, donde desgraciadamente priman y triunfan los sucedáneos».

Por si le faltara algo, el único concursante de raza negra que aspira este año al título del hombre más guapo de España es, además de cosmopolita, políglota. Vive entre Londres y Barcelona y es capaz de expresarse con fluidez en catalán, español, inglés, bambara (lengua mandinga hablada en Mali) y francés. De carácter apasionado y amante de la adrenalina, a Keita le encantan los deportes, en especial el fútbol y la natación. Y siente debilidad por la moda (es fan de Palomo Spain), el interiorismo y la fotografía. Se define como un «soltero de oro» que aspira a encontrar «una chica sencilla y auténtica». Pero advierte que a sus 23 años tener pareja no figura entre sus prioridades... Aunque, como él mismo reconoce en una entrevista publicada en 'El Mundo', el amor «no se planea, ocurre».

Pero Keita no se conforma solo con hablar de moda, de su estado civil o de su físico. También ha lanzado algunos dardos contra el adocenamiento de la sociedad actual. «Creo que cada persona es diferente, capaz de aportar su propio estilo, personalidad, visión, carácter… Si lo proyectáramos todos con honestidad y autenticidad seríamos como grupo mucho más atractivos. La diversidad debe ser un valor al alza, libre de prejuicios y abandonar la era del rebaño o del borreguismo».

No cabe duda de que la originalidad y la fuerza que proyecta la imagen de este singular candidato no está pasando desapercibida en el certamen de Mister International Spain. Sada Keita se ha propuesto marcar la diferencia mañana en Marina D'Or... Y solo cabe añadir ¡Qué guay!