¿Esta chica no es Irina Shayk?
Cristiano Ronaldo contrata para promocionar su perfume a una modelo idéntica a su exnovia. ¿Rabia, añoranza o simple coincidencia?
D. VIDAL
Sábado, 19 de septiembre 2015, 01:17
Un momento. ¿Esa chica no es Irina Shayk? ¿La mujer que acaricia, besa y cae rendida a los pies de Cristiano Ronaldo en ese anuncio ... de la tele no es su 'ex', con la que acabó tan mal? Pues va a ser que no. Es posible que muchos se hayan hecho esta misma pregunta al ver el 'spot' del delantero del Real Madrid, que ha contratado para promocionar su perfume 'Cristiano Ronaldo Legacy' a una modelo de innegable parecido con la 'top' rusa. No, la del anuncio no es Irina. Tampoco es Irina la de la foto grande de esta página. Se llama Madalina Ghenea, tiene 27 años -dos menos que Irina Shayk- y es rumana. En Hollywood se la conoce por haber mantenido una relación con Gerard Butler, aunque ha saltado a la fama, efectivamente, como «la doble de Irina».
De hecho, desde que la nueva línea de venta de la factoría del astro portugués fuera presentada por todo lo alto en una discoteca, hace unas semanas, las malas lenguas del papel cuché no se creen que la elección de Madalina fuera una simple coincidencia. Más bien, una constatación de que el futbolista no puede olvidarse de su exnovia quien, por cierto, estos días retoza de felicidad en la playa con su nueva pareja, el actor Bradley Cooper, y la madre de este. Vacaciones con suegra incluida. Por este motivo Cristiano Ronaldo también podría estar rabioso, de ahí el 'fichaje' de la exuberante Madalina para un anuncio cargado de mensajes sexuales. Pero tampoco hay por qué ser mal pensados.
El 'doppelgänger', término alemán con el que se designa a una persona idéntica a otra con la que no guarda ningún tipo de parentesco, es más habitual de lo que parece. Pasa con Zooey Deschanel y Katy Perry; con Javier Bardem y Jeffrey Dean Morgan o con Brittany Snow y Reese Witherspoon, por poner algunos ejemplos. Bradley Cooper, por su parte, se parece muy poco a Cristiano Ronaldo. O eso ha debido de pensar Irina.
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