Más de treinta enganches participarán en la 42ª edición del concurso-exhibición en La Malagueta

Los enganches competirán en diversas modalidades que van desde limonera y tronco hasta tresillo, cuartas, media potencia y enganche de ponis, categorías que ponen a prueba tanto la pericia de los cocheros como la armonía entre caballos y carruaje. Estas piezas, muchas de ellas de gran valor histórico, representan estilos tan característicos como el calesero o el inglés, símbolos de un trabajo artesanal que sigue transmitiéndose generación tras generación. Además, la cita incluirá un concurso de indumentaria, en el que se valorará la fidelidad al atuendo tradicional y la elegancia en la puesta en escena.

El jurado, integrado por especialistas en enganches y expertos en moda, tendrá la responsabilidad de evaluar aspectos que van más allá de la estética: la correcta conservación de los carruajes, la armonía del conjunto y la presentación general serán claves para obtener una buena puntuación. Junto a los galardones por modalidad, se entregarán reconocimientos especiales como Campeón de Campeones, Mejor Mayoral Local, Mejor Mujer Ataviada y Joven Promesa, entre otros. Todo ello convierte el certamen en un punto de encuentro donde se combina la técnica, el diseño y el respeto por la tradición.

El anuncio oficial se realizó en el Patio de Banderas del Ayuntamiento de Málaga, donde la concejala delegada de Servicios Operativos y Fiestas, Teresa Porras, destacó la importancia de esta cita dentro del calendario de actividades de la Feria: «Es un evento consolidado que permite mantener viva una costumbre que forma parte de nuestra identidad cultural». La edil subrayó que la organización ha contado con el apoyo de entidades locales y puso en valor la elección de Jorge González, director del AC Hotel Málaga Palacio, como padrino de honor, en reconocimiento a su compromiso con la ciudad y con las celebraciones más representativas.

Por su parte, la presidenta del Club de Enganche Malacitano, Mercedes Caparrós, detalló que el concurso constará de dos fases complementarias: una primera centrada en la evaluación estática de cada enganche y otra que permitirá al público disfrutar del movimiento y la coordinación entre caballos y carruaje. Caparrós insistió en que la exhibición no se limita a la estética, sino que premia la destreza, la preparación técnica y el respeto por los cánones tradicionales. «Trabajamos todo el año para que esta cita luzca como merece, porque forma parte de una de las tradiciones más singulares de Andalucía», afirmó.

El padrino de honor, Jorge González, aprovechó su intervención para mandar un mensaje de gratitud y compromiso, agradeciendo la confianza depositada en él y reconociendo el trabajo de quienes hacen posible que este tipo de tradiciones continúen formando parte del panorama cultural malagueño. «Es un orgullo acompañar esta edición en la que se pone en valor la belleza y la precisión de los enganches clásicos», señaló.

El director de Asuntos Taurinos de la Diputación, Borja Ortiz, cerró el acto incidiendo en la repercusión que este tipo de eventos tiene para Málaga: «La Plaza de Toros es un espacio esencial para la cultura y actividades como esta no solo preservan las costumbres, sino que también contribuyen a generar riqueza y dinamizar la economía local». Ortiz recordó que el recinto será escenario de otras actividades en las próximas semanas, reforzando su papel como uno de los grandes referentes culturales del verano malagueño.