Iberia compra Air Europa por 1.000 millones de euros

El grupo adquirirá la totalidad de las acciones de la empresa fundada por Juan José Hidalgo y espera cerrar la transacción en el segundo semestre de 2020, una vez haya obtenido las autorizaciones reglamentarias, tal y como informó a la CNMV. IAG financiará la compra -que abonará en efectivo- con deuda externa y conservará la marca Air Europa, que pasará a integrarse en Iberia bajo la dirección de Luis Gallego, pero se mantendrá como un centro de ingresos autónomo. Mientras tanto, ambas seguirán compitiendo como hasta ahora.

La operación cuenta con el respaldo de los inversores, a la vista de que las acciones de IAG llegaron a subir hasta un 2%, colocándose en máximos de los últimos ocho meses. No en vano, tras la compra, el grupo Iberia (integrado por Iberia, Iberia Express y Air Nostrum) desbancará a Ryanair y se convertirá en la principal aerolínea española por número de pasajeros al sumar casi 54,5 millones de viajeros frente a los 46,7 millones de la compañía irlandesa, según datos de AENA.

El grupo IAG -que además de Iberia cuenta con la española Vueling, así como British Airways, la irlandesa Aer Lingus y la compañía de bajo coste Level- pretende convertir Madrid en un centro aéreo capaz de competir de igual a igual con los cuatro grandes aeropuertos de Europa: Londres-Heathrow, París-Charles de Gaulle, Ámsterdam y Fráncfort. Además, le permitirá aumentar considerablemente las conexiones con América Latina y el Caribe al sumar 24 rutas transatlánticas, con el objetivo de alcancar el liderazgo del Atlántico Sur; de hecho, si finalmente se aprueba la compra, la cuota de pasajeros en las rutas a Latinoamérica se incrementará del 19% actual al 26%, con lo que dejará ya muy atrás a Air France-KLM, que tiene un 19%.

Pero esta operación aportará también importantes beneficios a los clientes, al proporcionar más flexibilidad de horarios y opciones al abrirse nuevas rutas con precios incluso más asequibles y con mejores servicios, así como más oportunidades para ganar puntos para sus programas de viajeros frecuentes, según resaltó el holding.

«IAG tiene un sólido balance en términos de adquisiciones de éxito, la más reciente la de Aer Lingus en 2015, y estamos convencidos de que Air Europa se inscribe en la estrategia del grupo», indicó su director general, Willie Wash, que incidió en que se trata de «un buen acuerdo», que incrementará un 10% los ingresos por tráfico, y «una gran noticia para España». En esta línea, Luis Gallego, director general de Iberia, recalcó que se trata de una operación de «gran importancia estratégica para el hub de Madrid, que durante los últimos años se había quedado por detrás de otros hubs europeos» (de los veinte aeropuertos más grandes de Europa, la capital española ocupa la posición 19 en cuanto a número de destinos ofrecidos y de los diez principales aeródromos, es el noveno en cuanto a países servidos). A su juicio, una vez finalice la adquisición, Madrid tendrá «una mejor posición» en las rutas desde Europa a América Latina y podría convertirse también «en una puerta de enlace entre Asia y América Latina».

Por su parte, Javier Hidalgo, consejero delegado de Globalia, recalcó que supondrá «un fortalecimiento del presente y futuro de la compañía», que este mismo lunes envió una carta a sus trabajadores informándoles de que están asegurados todos los contratos a largo plazo.

IAG financiará la compra con deuda externa y conservará la marca Air Europa, que pese a integrarse en Iberia seguirá siendo un centro de ingresos autónomo. El grupo confía en que la adquisición genere ganancias ya desde el primer año completo después del cierre (previsto para la segunda mitad de 2020), por lo que será en el ejercicio 2021, y que aumente la rentabilidad sobre el capital invertido de IAG en los cuatro años posteriores. La compañía liderada por Willie Walsh ha acordado pagar una penalización ('break fee') de 40 millones de euros en el caso de que no se obtengan las autorizaciones regulatorias pertinentes y que alguna de las partes decida resolver el acuerdo.

Tras completarse la compra, IAG prevé que la deuda neta respecto a su resultado bruto de explotación (Ebitda) sea 0,3 veces mayor, en comparación con el 1,2 registrado al final del tercer trimestre de 2019. La adquisición constituye una transacción de Clase 2 a efectos de las 'UK Financial Conduct Authority's Listing Rules' y, como tal, no requiere la aprobación de la junta de accionistas de IAG.

IAG confía en que la adquisición genere ya desde el primer año completo después del cierre (previsto para la segunda mitad de 2020) un aumento del beneficio por acción, mientras que la rentabilidad sobre el capital invertido de IAG se logrará en los cuatro años posteriores. La compañía liderada por Walsh ha acordado pagar una penalización ('break fee') de 40 millones de euros en el caso de que no se obtengan las autorizaciones regulatorias pertinentes y que alguna de las partes decida resolver el acuerdo.

Tras completarse la compra, IAG prevé que la deuda neta respecto a su resultado bruto de explotación (Ebitda) sea 0,3 veces mayor, en comparación con el 1,2 registrado al final del tercer trimestre de 2019. La adquisición constituye una transacción de Clase 2 a efectos de las 'UK Financial Conduct Authority's Listing Rules' y, como tal, no requiere la aprobación de la junta de accionistas de IAG.

La operación se produce en un momento complicado para el sector aéreo, marcado por la guerra de precios en Europa con la llegada de las 'low cost', el incremento del precio del petróleo, el 'brexit' y el veto al Boeing 737 MAX. Todos estos factores ya auguraban que se iba a iniciar un proceso de concentración en el mercado, lo que ahora se confirma. Si llega a buen puerto, la compra de Air Europa podría hacer olvidar a IAG el fracaso del intento de comprar Norwegian: a principios de 2019 anunció que había comprado el 4% de la compañía de bajo coste noruega y que planeaba lanzar una OPA, lo que finalmente tuvo que descartar.

Air Europa es una de las mayores compañías aéreas españolas, con vuelos interiores e internacionales hacia 69 destinos en América Latina, Estados Unidos, el Caribe y el norte de África.

La compañía transportó 11,8 millones de pasajeros en 2018 con una flota de 66 aviones. Su facturación fue de 2.100 millones de euros en 2018, con un beneficio neto de 48,8 millones de euros.

IAG, que acaba de publicar unos resultados peores de los esperado en el tercer trimestre por la huelga de pilotos en British Airways, es uno de los mayores grupos aéreos del mundo, con 113 millones de pasajeros transportados cada año hacia 268 destinos.