Unicaja confía en que las «decisiones» sobre la fusión con Liberbank se tomen en «las próximas semanas»
La junta general de accionistas respalda la gestión del presidente Manuel Azuaga en 2018 y ratifica el reparto del 40 por ciento del beneficio en dividendos
El presidente Unicaja Banco, Manuel Azuaga, expresó esta mañana a los asistentes a la junta general de accionistas su confianza en que en las ... próximas semanas habrá decisiones de Unicaja y Liberbank cara a la integración de las dos entidades, si bien ambos consejos aún no han dado pasos formales sobre el proceso que se inició el pasado verano. Azuaga aseguró que «puede confirmarse que los contactos a que nos referíamos en el hecho relevante de 12 de diciembre pasado continúan y esperamos que en las próximas semanas se puedan adoptar las decisiones que permitan llevar adelante la operación». Todo apunta a que el acuerdo en relación al plan de fusión ya sometido al supervisor europeo pueda llevarse a las juntas de accionistas el próximo mes de junio, convocatorias que habrán de realizarse con un mes de antelación. La integración será el tema monográfico de esa próxima junta extraordinaria, sin duda la más importante hasta ahora de la entidad, que prevé liderar el sexto banco por activos del país, con más de 96.000 millones. La de ayer, una convocatoria ordinaria para los representantes de los más de 19.000 accionistas del banco, sirvió para ratificar la gestión del consejo de administración, que reduce a partir de ahora de 13 a 12 sus miembros, y el reparto de 61 millones en beneficios, el 40 por ciento de los resultados obtenidos en 2018. Este porcentaje supone adelantar dos años el compromiso con los inversores. Azuaga expuso a los 347 asistentes a la junta -accionistas y representantes con voto delegado- la necesidad de mejorar la rentabilidad del banco, actualmente situada en un 4 por ciento respecto a sus fondos propios (ROE), y elevarla al 8 por ciento que prevé el actual plan de negocio con vigencia hasta 2020. El presidente también incidió en el hecho de que la alta capitalización de la entidad «castiga» ese indicador, pero «nos permite aspirar a liderar operaciones corporativas como la actual». En su intervención, destacó el esfuerzo del banco en el saneamiento de la cartera de los activos improductivos -inmuebles adjudicados y créditos dudosos- y que ha permitido su reducción en casi mil millones en el pasado ejercicio.
Por su parte, el director general de la fundación bancaria, Sergio Corral, en su calidad de representante del principal accionista de la entidad, con el 49,7% del capital, incidió en el turno de intervenciones en la necesidad de revertir la baja rentabilidad, y de mejorar el beneficio por acción, que «desde hace dos años se mantiene un 40 por ciento por debajo de sus anteriores niveles». «Deseamos que una adecuada focalización de la gestión hacia estos estos puntos permita recuperar el nivel adecuado de rentabilidad», planteó como reto del consejo ante la junta. Por parte de los ahorradores, clientes y pequeños accionistas, un representante de Adicae reclamó de la entidad un cambio en su política en relación a las reclamaciones de cláusulas suelo, una posición que defendió en su respuesta el presidente Manuel Azuaga desde el planteamiento de la entidad de que se trata de un asunto en el que debe analizarse «caso por caso».
A unos días de que se conozcan los resultados del primer trimestre, -ayer se conoció la caída del 28,5% en los de Liberbank- la negociación que conducirá a la absorción del banco que integra a las antiguas cajas de Asturias, Cantabria, Extremadura y Castilla La Mancha, ha entrado en su fase decisiva con la denominada ecuación de canje -el peso de cada entidad en el reparto de poder de la nueva- un aspecto aún no cerrado y que se moverá en torno a un 60/40 en el porcentaje de cada entidad, con Unicaja como banco absorbente y con los activos como principal pero no único aspecto en la ponderación.
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