Los parados ya pueden compatibilizar la prestación con ser autónomos
La ley que fomenta el trabajo por cuenta propia y que también permite cobrar todo el desempleo en un único pago entró en vigor ayer
David Valera
Martes, 13 de octubre 2015, 00:34
Autónomos y emprendedores. Esas son dos de las palabras más utilizadas por el Gobierno en esta legislatura. Y es que el Ejecutivo ha visto en ... el trabajo por cuenta propia y la capacidad de iniciar un negocio parte de las soluciones para lograr reducir las elevadas tasas de paro de España todavía las más altas de la UE sólo superadas por las griegas. Entre la batería legislativa para impulsar esta modalidad laboral destaca la Ley de Fomento del Trabajo Autónomo que entró en vigor ayer. Su objetivo es incentivar y facilitar el autoempleo entre los parados. Para ello la normativa contempla, entre otras cosas, que se pueda compaginar durante un máximo de nueve meses la prestación por desempleo con el alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), una posibilidad que hasta ahora estaba reservada a los menores de 30 años.
La nueva normativa también extiende a todos los parados la posibilidad de que puedan capitalizar hasta el 100% de la prestación por desempleo, es decir, cobrar la totalidad de la cuantía en un único pago. El objetivo de la medida es facilitar la inversión y ayudar a hacer frente a los primeros gastos de la apertura de un negocio. Antes la capitalización estaba limitada al 60% de la prestación si el desempleado era mayor de 30 años. Hasta 150.000 personas podrían beneficiarse de esta modificación en la regulación, según la estimación realizada por el Ministerio de Empleo.
Otro de los pilares de la ley se basa en garantizar una segunda oportunidad para el emprendedor en caso de que el negocio no sea rentable. En este sentido, se amplía desde los 24 meses hasta los 60 meses el plazo para disponer de la prestación por desempleo interrumpida al poner en marcha el negocio. La normativa incluye que los autónomos disfruten durante seis meses de una tarifa plana de 50 euros en la cuota a la Seguridad Social. Una tarifa que se amplía también a aquellos que contraten empleados. Además, se facilita que los autónomos económicamente dependientes (aquellos en los que al menos el 75% de sus ingresos proceden de un único cliente o empresa) contraten a un trabajador que les sustituya para poder conciliar así la vida laboral y familiar.
«Esta ley supone un gran avance y un paso adelante en la mejora del emprendimiento. Son medidas que dan protección al autónomo y ayudan a la creación de empleo», señaló el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor. Por su parte, el secretario general de UPTA, Sebastián Reyna, considera que estas medidas supondrán «más de 30.000 nuevas altas de aquí a finales del año 2015», aunque solicitó que se realice un seguimiento de la evolución de los negocios para conocer si son duraderos.
Creación de empleo
Desde el departamento que dirige Fátima Báñez estiman que el autoempleo crecerá en 550.000 personas hasta 2019 (actualmente hay 3,1 millones de autónomos). De momento, a lo largo del primer semestre de 2015 los autónomos han generado una media de 403 empleos netos cada día hasta crear 72.542 nuevos puestos de trabajo en ese periodo, según ATA. «Uno de cada tres empleos generado en el primer semestre tiene como protagonista a los autónomos», aseguran desde la federación.
Más allá de las cifras, lo que está claro es que los autónomos se han convertido en un colectivo fundamental en las políticas del Gobierno, máxime a unas pocas semanas de las elecciones. De hecho, en la reforma fiscal se extendió a todos los autónomos la retención del 15% que se aplicaba a los trabajadores por cuenta propia con rendimientos inferiores a 15.000 euros anuales.
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