Expectativas, confianza y esperanza

Cuanto antes consigamos tener entornos seguros antes podremos recuperar el turismo, tan importante en nuestra provincia, o se reabrirán los comercios con normalidad o el sector del ocio podrá impulsarse. Para ello, además de la responsabilidad individual y colectiva –que en líneas generales estamos aplicando, salvo contadas excepciones– son las Administraciones las que tienen la capacidad y el poder para implementar actuaciones que incidan; cito aquí por ejemplo la máxima velocidad en la vacunación.

Todo ello ayudará a recuperar la confianza, fundamental para la reactivación económica. Los empresarios y trabajadores están ansiosos por desarrollar su actividad y generar riqueza y empleo. Para evitar la destrucción de más tejido productivo, se deben mantener los estímulos necesarios para sostener las empresas y el empleo. Si a ello unimos una buena aplicación de las ayudas comunitarias, podemos estabilizar la caída y comenzar a crecer cuanto antes. Es cierto que esta crisis hará replantear muchos modelos de negocio, para lo cual es fundamental la resiliencia. En el sector agroalimentario, la expectativa que tenemos es de continuar nuestro trabajo de ofrecer alimentos a la sociedad, como hemos demostrado en la pandemia. Y no solo en España, sino en el mundo, con una fuerte vocación exportadora, para lo cual son necesarias empresas dimensionadas. Los agricultores cooperativistas agrupados lo pensamos así.