El vino, un sector que brinda futuro
Expertos debaten en Ronda la situación de la industria vinícola en un Foro Agroalimentario
Agustín Peláez
Martes, 11 de noviembre 2014, 01:46
La viticultura en Málaga es un sector con siglos de tradición, pero relativamente joven tal y como hoy lo conocemos, con bodegas pequeñas que producen ... vinos de gran calidad, capaces de competir con los mejores a nivel mundial. Muestra de ello son los múltiples premios y galardones que obtienen las distintas bodegas implantadas en la provincia, a pesar de la gran competencia existente en el sector. Sólo en España hay más de 45.000 marcas diferentes de vinos. En Málaga y provincia existen en la actualidad 45 bodegas inscritas en el Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Málaga y Sierras de Málaga -esta última es la más reciente, de las cuales casi la mitad están ubicadas en la Serranía de Ronda, comarca que se ha convertido en todo un referente del sector, a pesar de que muchas de ellas apenas llevan una década funcionando.
Un ejemplo de la importancia de este sector son los 40 millones de euros que facturan las bodegas malagueñas. Además esta industria es la quinta en cuanto a exportaciones en Málaga, por detrás del aceite de oliva, la hortofruticultura, el sector cárnico y el lácteo.
La Junta anima al sector a invertir en conocimiento para exportar y subsistir
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La clausura del primer Encuentro Territorial del Agroalimentario Malagueño, organizado SUR, Junta de Andalucía y la Agencia de Promoción Exterior Extenda y que tuvo lugar en el Centro Integral del Vino de Ronda, corrió a cargo del consejero de Economía, Ciencia, Innovación y Empleo, José Sánchez Maldonado, que pidió al sector la aplicación del conocimiento en los procesos de elaboración, por considerar que sin «invertir en conocimiento, el vino que hagamos no podrá subsistir en el mercado, porque para subsistir hay que ser capaces de que nuestro producto tenga una calidad especial y de que seamos capaces de internacionalizarlo. Si no lo conseguimos, muy difícilmente sacaremos adelante nuestras empresas».
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Sánchez Maldonado aconsejó asimismo a los representantes de las bodegas malagueñas la necesidad de aplicar gestión al vino. En este sentido, puso como ejemplo países como Australia o Nueva Zelanda, que tienen incluso revistas dedicadas a la economía del sector y a la gestión de las empresas vitivinícolas. «Tenemos que avanzar en la calidad mediante la aplicación del conocimiento, ser capaces de tener investigación en valor añadido si queremos progresar. Economía, por un lado, e investigación, por otro, sin olvidarnos de estar muy al día, porque el conjunto de todo nos dará la ventaja comparativa para hacer un producto de calidad y que se pueda globalizar», dijo el consejero.
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Por su parte, la consejera delegada de la Agencia de Promoción Exterior, Extenda, Vanessa Bernard, señaló que el sector agroalimentario y bebidas de Andalucía ha arrebatado por primera vez a Cataluña el primer puesto en cuanto a exportaciones al superar los 5.700 millones de euros. «En los primeros ocho meses del año ha habido un pequeño descenso de las exportaciones en general, pero el agroalimentario ha subido un 13%», declaró. Asimismo, Bernard destacó que el agro andaluz ha reforzado su presencia en la UE al crecer un 77% en 2013. Respecto al sector en Málaga, señaló que es la provincia que más ha crecido en estos cinco años y la que más ha crecido también en 2014, con más de un 14%. Sobre el vino, dijo que las exportaciones suponen 5,7 millones de euros, creciendo un 79,8% en los ocho primeros meses de 2014.
Uno de los problemas de las bodegas malagueñas es su escasa dimensión, dado que se trata de pequeñas empresas familiares con producciones limitadas. Por esta razón, para poder competir en el difícil mundo del vino España fue en 2013 el mayor productor mundial con 50,5 millones de hectolitros, un 40% más que en 2012, los bodegueros malagueños han tenido clara su apuesta por la calidad, como valor diferenciador. Y lo más importante de todo es que la industria local mantiene este compromiso de calidad como objetivo prioritario. Así lo expresaron ayer los bodegueros en el primero de los tres Encuentros Territoriales del Agroalimentario Malagueño, organizado por SUR con la colaboración de la Junta de Andalucía y la Agencia Andaluza de Promoción Exterior (Extenda), con el objetivo de conocer la agroalimentación como motor económico y analizar el caso concreto de las bodegas y los vinos made in Málaga.
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Una cita perfecta para hablar de vino
El director de SUR, Manuel Castillo, que inició el encuentro, señaló que el agroalimentario es «una de las joyas de la economía malagueña, y en estos tiempos de crisis, aún más». Asimismo, recordó que Málaga es la provincia andaluza con más industrias inscritas en el registro de empresas agroalimentarias de Andalucía, con 367, las cuales crean más de 6.000 empleos que se suman a los 13.000 de la agricultura provincial. Castillo valoró también la apuesta de esta industria por la innovación y la internacionalización, dos aspectos clave para afrontar los retos y el futuro con cierto optimismo.
El delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, señaló por su parte que estos foros tienen como finalidad profundizar en el trabajo del agro malagueño, «tratado como el hermano pequeño de la economía de la provincia y que no tienen el reconocimiento que se merece».
La alcaldesa de Ronda, María de la Paz Fernández, agradeció la elección de la localidad para albergar el Encuentro, que congregó a más de un centenar de personas. La regidora destacó la tradición vinícola de la ciudad del Tajo, y llegó a asegurar que «Ronda se bebe en cada copa de vino de nuestras bodegas».
El Encuentro Territorial Agroalimentario, que se estructuró en tres foros, sirvió para que sus protagonistas y ponentes expresaran asimismo la necesidad de avanzar en la promoción de los vinos malagueños en el mercado de proximidad en un intento de incrementar las ventas, apostar por el enoturismo, aprovechando los más de siete millones de visitantes y turistas que acuden cada a año a Málaga, y trabajar la internacionalización con el firme objetivo de incrementar las exportaciones.
No obstante, el presidente de la Asociación de Bodegueros y Viticultores de Ronda y propietario de la Bodega Doña Felisa-Chinchilla, José María Losantos, lamentó el desconocimiento que existe de los vinos que se producen en Málaga, por lo que se mostró partidario de trabajar por el mercado de proximidad. «Si logramos promocionar el consumo aquí -dijo, refiriéndose a la provincia-, no tendríamos producción para atender la demanda».
Francisco Retamero, de bodegas Descalzos Viejos, que produce 40.000 botellas al año y que exporta sólo el 15%, destacó la apuesta por la calidad del sector y la importancia que ha tenido en plena crisis el enoturismo, faceta en la que dijo hay que seguir trabajando. En este sentido, Flavio Salesi, de la misma bodega, lamentó que el Ayuntamiento no haya avanzado en la aprobación del PGOU, lo que les impide trabajar de manera adecuada tanto en la elaboración de los vinos por falta de espacio, y en el enoturismo. Sobre los precios de los vinos de Ronda, Retamero dijo que «dentro de la calidad estamos en la parte baja de los precios»
La directora del área de Coyuntura Regional de Analista Económicos de Andalucía, Felisa Becerra, apuntó que el sector del vino tiene todavía un largo recorrido y que la internacionalización es una alternativa, a la vez que incidió en la necesidad de apostar por la calidad y la diferenciación. «Existe una demanda creciente de productos de calidad y diferenciados», dijo.
Por su parte, la enóloga Bibiana García, de Bodega Los Aguilares, pidió al sector unidad a la hora de defender la calidad, «porque lo contrario puede perjudicarnos a todos». Asimismo, dijo que Ronda no tiene una identidad varietal que le haga ser conocida fuera, pero que la variedad de vinos que se producen es también un encanto.
El gerente del Ceder Serranía de Ronda, Miguel Prego, abogó por la realización de promociones conjuntas para incrementar la presencia de los vinos de los establecimientos hosteleros y para fortalecer la imagen de marca.
Ya en el último de los bloques de debate, Diego Rivas, de la delegación de Agricultura, expuso un caso de éxito como el de Finca La Reja, mientras que el catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad de Córdoba, Manuel Izquierdo, habló de la «extremada regulación» del sector del vino.
El Encuentro Agroalimentario sirvió también para dar a conocer el caso de Destilerías El Tajo, una empresa centenaria, cuyo gerente, Diego Jesús Ruiz, dijo que se ha esforzado siempre por atender la demanda del mercado, mirando la calidad.
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