Márquez ya busca el 'match ball'

Que el mallorquín sea quien ha vencido en Rímini en las tres últimas ediciones es, probablemente, el último aliento que le queda al propio Jorge y a Valentino Rossi antes de que Márquez se haga con su segundo Mundial. Y es que el líder del campeonato podría salir de San Marino con un 'match ball'. O lo que es lo mismo, podría proclamarse campeón en Motorland, siguiente carrera y todavía en el mes de septiembre.

Lo cierto es que HRC apenas se inmutaría ante un triunfo de cualquiera de las Yamaha, algo que tendría mucho más de testimonial que de peligro real. Y es que tras Misano llegan cuatro circuitos consecutivos que son los más favorables a Honda, dentro de la secuencia habitual de esta temporada, en la que todos los circuitos tienden a beneficiar a la mejor montura. Si no es en Motorland será en Motegi, en Philip Island o en Sepang, pero sólo un desastre en forma de lesión apartaría al de Cervera de su segundo entorchado.

El panorama es tan desalentador como lo ha sido la temporada después de los 'ceros' con los que arrancó Lorenzo y las victorias de Márquez, pero San Marino es el penúltimo soplo de aire fresco hasta llegar a Cheste, traca final y circuito atípico y revirado en el que puede pasar cualquier cosa. Lorenzo se encuentra ahora en plena forma y acumula podios y luchas con Márquez aparentando estar un escalón por encima de Pedrosa, cuando la Yamaha se lo permite, y Rossi. Es la tierra del italiano, un circuito muy cercano a su casa, pero quien ha ganado allí en las tres ocasiones precedentes es el '99'. Valentino tendrá la rabia de defenderse delante de su gente y en un trazado que se conoce al milímetro, por lo que tampoco debería ser descartado. El 'doctor', que ha reconocido a lo largo de esta semana que se marchó de Yamaha en su día por 'culpa' de Lorenzo, quiere ahora al menos un triunfo para adornar su palmarés, tal y como consiguiera en 2013 en Assen. Tampoco hay que descartar a Pedrosa, el único que ha conseguido derrotar a Márquez en el presente curso y la última Honda que logró la victoria en San Marino.

Las otras dos balas locales son Dovizioso y Iannone, que a los mandos de sus respectivas Ducati consiguen buenos arranques que acaban disolviéndose mediadas las carreras. Nadie fuera de estos seis pilotos es esperado en el cajón en un fin de semana que puede ser el penúltimo con emociones fuertes de lo que resta de año.

Los españoles, lanzados

Moto2 y Moto3 presentan realidades completamente distintas, pero comparten un guión en los tiempos recientes. Y es que los españoles marchan decididos a conseguir un nuevo triplete mundialista. En la categoría intermedia Tito Rabat acumula dos victorias consecutivas, algo que le ha hecho coger un colchón respecto a Mika Kallio. El finlandés, compañero de equipo de Esteve, amenaza con sacar las garras, y es la única persona con posibilidades reales de quitarle el Mundial. Tras ellos, la evolución de Maverick Viñales sigue sorprendiendo, mientras que hasta una docena de pilotos podría asomar su cabeza por el podio.

En Moto3 es el australiano Jack Miller quien comanda la tabla, pero el reciente doblete de Silverstone de las Estrella Galicia de Álex Rins y Álex Márquez les ha llenado de confianza hasta el punto de que ambos aspiran a truncar las opciones del irregular líder. En Inglaterra Romano Fenati y Efrén Vázquez se quedaron algo desenganchados, por lo que para ellos este fin de semana puede resultar definitivo en el aspecto negativo.