Alonso saldrá quinto y hace soñar en Hungría

Dicha igualdad jugó a favor también de Alonso, aún ligeramente resentido de su lesión de espalda. Se acercó sobremanera a la pole de Leclerc, una distancia impensable para él y para su compañero Stroll, que consiguió una inédita sexta plaza que le invita a soñar. En Aston Martin les tocó por fin cara y, a falta de confirmar el domingo, parece que las novedades que estrenaron y probaron en Spa sí son las mejoras que soñaban.

El buen rendimiento de Aston Martin quedó patente ya en la Q1. Y no solo por ver a a Lance Stroll pasar a la Q2, que ya es noticia por sì misma, sino porque Fernando Alonso se sacó una vuelta que hizo que muchos levantaran la ceja. El asturiano pasó el corte con el segundo crono de la tanda, solo superado por Oscar Piastri y por apenas un suspiro. Solo siete centésimas le separaron del crono del imbatible McLaren, que desde el primer minuto marcó la pauta.

El asturiano fue la gran sorpresa, pero no la única. Por ejemplo, por abajo, Franco Colapinto logró pasar a la Q2 cuando casi nadie contaba con él. El argentino dejó fuera a Yuki Tsunoda, con el segundo Red Bull, que sigue sin encontrar el camino. Le acompañaron bajo la guillotina los franceses Gasly y Ocon, además de Hulkenberg y un inesperado Albon, que no tuvo su tarde.

La Q2 cumplió más con el guion previsto. Los McLaren se quedaron con un doblete que no iba a pagarse mucho. Fue una tanda más tensa, especialmente porque la lluvia hizo una tímida aparición en forma de gotas en algunas partes del circuito, que poco a poco pusieron en alerta a los pilotos. Especialmente a esos que decidieron tomarse al pie de la letra que el de Hungría es un trazado asimilable a Mónaco, pero sin muros que lo limiten.

Con la sorpresa de que Stroll pasara a su primera Q3 de la temporada y Alonso con él, confirmando el salto adelante de Aston Martin en este fin de semana, los límites de pista pusieron en alerta a muchos, ya que vieron que les podía costar caro. Por ejemplo, a un Antonelli que saldrá decimoquinto por no cumplir con la normativa. Junto a él, cayeron eliminados en esta Q2 Ollie Bearman, que apunta a otro undécimo y serían cinco consecutivos, Lewis Hamilton, Carlos Sainz, Franco Colapinto y el citado Antonelli.

La lógica apuntaba a que el orden iba a ser más normal en esta Q3, pero acabó con un inesperado invitado por delante. Y es que, pese a que en el primer intento fueron los McLaren, con Piastri primero y Norris segundo, algo se movió por detrás. Russell marcó el tercer y Fernando Alonso, con una vuelta de las mejores en mucho tiempo, se conformó con el cuarto que, a la postre, sería el quinto con el que saldrá a pista este domingo. «Ha sido una gran vuelta», resumía de manera sucinta Alonso a la radio. Y tanto que lo fue, porque es el mejor resultado en parrilla que se podía esperar: hace no tanto —apenas cinco días— nadie habría pensado que iba a estar a quedarse a una décima de la pole.

Pero la noticia, más allá del tamiz de Alonso, fue el hombre de la pole. Charles Leclerc, que sigue arrasando a Hamilton en su batalla personal, marcó una memorable pole —la 27 en su cuenta personal— por delante de Oscar Piastri y Lando Norris. La igualdad extrema en este trazado es de tal calado que entre los cuatro primeros, que cierra Russell, solo hay 53 milésimas. Si este domingo persiste esta igualdad, puede ocurrir de todo.