Suso Gallardo coge el testigo de Diego Carrasco en el Rincón Fertilidad

En una entrevista a SUR, días antes de marcharse hacia el Europeo de Polonia para debutar como técnico de la selección española absoluta de balonmano-playa femenina, Carrasco ya comentó: «Espero que el día de mañana, Suso tome mi relevo y entrene al equipo, pero no me gustaría irme de Málaga y del club sin antes haber ganado un título, por todos nosotros y por la ciudad». Por desgracia, el técnico se marchó dejando una promesa en el aire. Él, que nunca tuvo un no por respuesta y siempre terminaba lo que empezaba. Un hombre de palabra. Soñaba siempre con alzarse con un título con el equipo de su vida, el Rincón Fertilidad y su competición fetiche era la Copa de la Reina. Quizá la próxima temporada hubiese sido la idílica para ello, dado que el torneo del KO se celebrará en Alhaurín de la Torre, ciudad a la que pretendía mudarse en poco tiempo junto a su pareja y presidenta del club, Pepa Moreno.

Un sueño que ahora buscará cumplir Suso Gallardo, en parte, en su nombre. Este malagueño de 32 años, cuenta con el título de entrenador nacional de balonmano y una larga trayectoria en las categorías de balonmano base. Debutó como entrenador en el Club Málaga Norte, filial del Rincón Fertilidad desde hace dos años y tras casi una década en la División de Honor Plata, la segunda categoría femenina nacional, llegó al banquillo de Carrasco. Junto a él y al resto del cuerpo técnico, estos años también ha realizado tareas de organización de partidos, preparación y, sobre todo, búsqueda de nuevos talentos para fichar. Además, el pasado mes fue elegido para ser entrenador de la selección malagueña femenina cadete. En el caso de la masculina, el que asumió este puesto fue el exinternacional malagueño Carlos Soler.

Sin duda, ésta no era la forma que Gallardo soñaba para este momento. Como el propio Carrasco comentaba, esperaba hacerlo después de que pusiera fin a su etapa como entrenador, por elección propia y tras haber conseguido la Copa que tanto anhelaba. Por todos los que habían estado a su lado durante dos décadas de trabajo en el club y también por la propia Málaga. Porque a Carrasco, defensor a ultranza de la igualdad en este deporte, le gustaba pensar que un título daría más visibilidad y protagonismo al equipo y al balonmano femenino.

Vuelta a la calma

Tras la semana más complicada para el club costasoleño, le ha tocado a su directiva comenzar a tomar decisiones, dado que la temporada de Liga Guerreras Iberdrola comenzará el 8 de septiembre y, la pretemporada arrancará ya a mediados de la próxima semana. Hacía falta dar un paso al frente y empezar a trabajar cuanto antes para que el proyecto, sencillamente, no desapareciera. Así, la decisión de convertir a Gallardo en el primer entrenador se hizo oficial ayer. «Ahora mismo tengo un cúmulo de sensaciones, de sentimientos encontrados por todo lo sucedido. Llego con las fuerzas y las ganas de tirar para adelante, por Diego, por Pepa, por el club y por este proyecto tan importante y tan bonito que ellos han formado y que hay que sacar para adelante», expresó en sus primeras palabras en el cargo.

La necesidad de que el Rincón Fertilidad volviera a la normalidad y se preparase para recibir a la nueva plantilla ha sido el motor para que el nuevo técnico acepte su tarea con mayor compromiso que nunca por el club. Gallardo también se ha pronunciado sobre el estilo de juego que intentará llevar en el equipo, con una línea muy semejante a la de Carrasco. «Veíamos el balonmano muy parecido, por lo que la línea de juego va a ser continuista e intentando hacer lo que ya teníamos en mente cuando formamos el equipo. Creo que vamos a tener la seña de identidad que siempre tuvo el Rincón Fertilidad de la mano de Diego Carrasco», asegura.

En lo que respecta a lo que el nuevo técnico busca en su plantilla, sólo comentó que quiere entrega, dedicación e ilusión. «Que los rivales cuando se enfrenten al Rincón Fertilidad sepan que enfrente tienen un equipo que no se rinde nunca, que pelea hasta el final», explicó. Algo que tendrán que hacer entre todos para continuar el legado de Diego Carrasco.