Jesús Janer: De entrenar en casa a subir al podio del Mundial
El malagueño consigue dos hitos en un mes: bronce en el Campeonato de España de Culturismo Natural y mismo puesto en el internacional de Las Vegas
cristina pinto
Domingo, 28 de noviembre 2021, 00:08
Una frase se repite varias veces durante la conversación con Jesús Janer: «Si quieres estar entre los mejores tienes que comportarte como los mejores». Y ... esa filosofía, al fin y al cabo, es la que le ha llevado a estar ahora mismo entre la élite mundial del Culturismo Natural. Pero todo esto ha sido «una carrera meteórica», o así lo define el propio protagonista de esta historia. Este malagueño tiene ahora 27 años y fue con 25 cuando decidió meterse de lleno en esta disciplina, aunque reconoce haber practicado siempre deporte y llevar «el gen de la competición». «Me llegó más fuerte esa afición de entrenar, de llevar mi cuerpo a otro nivel y me compré una 'Rack' (jaula de entrenamiento), la instalé en la terraza de mi casa y allí entreno», explica Jesús Janer sobre los inicios. «No he pisado un gimnasio. Soy lo más atípico de esto», añade el culturista.
Allí, en la «jaula» de su terraza en casa (Los Álamos), entrena unos tres o cuatro días «como mucho» a la semana y dedica a cada sesión una hora y media aproximadamente. «Creces cuando descansas, no cuando entrenas. Yo hago un entrenamiento muy intenso, le doy el estímulo oportuno al cuerpo para crecer», admite Janer. Pero en dos años de entrenamiento todo ha ocurrido muy rápido. Y los últimos logros han sido en apenas un mes: el pasado 24 de octubre, en el Campeonato de España de Culturismo Natural organizado por la WNBF en Mallorca, este culturista malagueño se alzó con el tercer puesto en la categoría amateur 'Lightweight' (peso ligero).
El dato
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25 años Fue la edad con la que Jesús Janer comenzó a prepararse para competir en Culturismo Natural. Ahora, a sus 27 años es tercero en España y en el Mundo en categoría 'Amateur', todo entrenando desde la terraza de su casa en Los Álamos.
«Fui sin ninguna expectativa, sólo quería probar lo que había entrenado en estos años», señala Jesús Janer cuando recuerda el campeonato nacional. Todo salió mejor de lo que esperaba. Y el culturista asegura que fue en una categoría superior a la suya habitual: «Esa categoría era para más de 68 kilogramos y yo peso menos de eso», confiesa. Y después de la sorpresa en Mallorca con el bronce nacional, llegaba el salto al plano internacional. Este culturista de Los Álamos ya pensaba en cómo hacerlo para poder viajar a Las Vegas (EEUU) para disputar el Mundial de Culturismo Natural. Necesitaba buscar patrocinadores, porque si no le era imposible participar, pero los encontró. «He tenido toda la suerte del mundo porque conseguí patrocinadores y gracias a ellos pude ir a Mundial. Ellos son 'Laboratorios Kapyderm' y 'Fundición Fumbarri'», agradece el malagueño.
Lo consiguió y llegó a Las Vegas el 17 de noviembre, tres días antes del torneo. «Nada más llegar perdimos la maleta. Todo empezó como estas veces que piensas 'Uh, qué bien me va a salir todo'», revela Jesús Janer con tono humorístico. Pero no todo es como empieza, sino como acaba. Y acabó mucho mejor de lo esperado: tercer puesto mundial, aunque esta vez sí en su categoría, 'Bantaweight'.
De Málaga a Las Vegas
Cuando Jesús Janer se pone a recordar el momento, no puede evitar seguir sorprendiéndose: «Me llamaron en el Top5, que ya eso no me lo esperaba porque claro, al fin y al cabo soy un chaval que lleva dos años entrenando y en su propia casa sin ayuda de ningún entrenador. Pero cuando dijeron mi nombre en el tercer puesto es que ya estaba loco de contento», rememora el culturista.
Pues eso, «un chaval que lleva dos años preparándose sin entrenador y en casa», ha conseguido alzarse con el tercer puesto nacional y mundial en Culturismo Natural, en categoría amateur. Al final parece que esa frase que Jesús Janer tanto repite puede ir teniendo su efecto: «Si quieres estar entre los mejores tienes que comportarte como los mejores». Cuando llegó de tierras estadounidenses a Málaga, lo primero que hizo fue tomarse «un buen plato de puchero». Y, una semana después, en lo único que Jesús Janer piensa es «en seguir creciendo a nivel personal y laboral».
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