Japón dinamita todos los pronósticos con su victoria sobre Irlanda

Japón ya habia dado la nota en el mundial pasado con su también inesperada victoria sobre Sudáfrica, aunque en aquella ocasión no consiguió clasificarse para cuartos de final. Ahora los nipones, con una potente liga profesional y más de 100.000 jugadores federados, han demostrado que no han perdido el tiempo en los cuatro años transcurridos entre aquella victoria inesperada y la del pasado sábado, que los pone al borde de la clasificación y sitúa contra las cuerdas no a Irlanda, a la que le quedan dos partidos casi de trámite, sino a Escocia, que ya perdió ante los irlandeses y todavía le queda por delante enfrentarse a los locales. El grupo A, que en principio se presentaba como un trámite sencillo para los europeos, se ha convertido en un polovorín.

En el grupo C, considerado el 'grupo de la muerte' por la presencia de tres potencias, Argentina cumplió sin convencer el objetivo de ganarle con punto bonus ofensivo a Tonga(28-12) y ahora depende de vencer a Inglaterra para tener opciones. Para hacerlo debería mejorar sensiblemente lo mostrado hasta ahora. A Francia, el tercero en liza, sólo el pronóstico de la llegada de un tifón pone en peligro su prácticamente segura victoria sobre Estados Unidos. Si Argentina no consigue vencer a Inglaterra, los galos estarán clasificados.

El duelo más interesante de este fin de semana fue el Gales-Australia, dos candidatos al título que protagonizaron un partido de primer nivel que se acabó decantando para los europeos (29-25), lo que los sitúa a las puertas de pasar como primeros en el grupo D.

En ese mismo grupo, Georgia demolió a Uruguay (33-7) y quedó a punto de asegurarse la tercera plaza, que da acceso a la clasificación directa para la próxima Copa del Mundo. De esa manera se liberaría una plaza europea, lo que puede favorecer las posibilidades de que España pueda estar en Francia 2023.