España consuma una goleada anunciada

El mayor problema en un partido con tanta diferencia entre uno y otro conjunto era comprobar si los Hispanos se iban a tomar en serio el encuentro, o simplemente iban a especular con su superiodidad. Pero estaba claro que Jordi Ribera no quería sufrir como en anteriores encuentros y así que los suyos saltaron a la cancha con la lección perfectamete aprendida. También es cierto que la alineación inicial, con muchos hombres suplentes como Ángel Fernández, Balaguer, Figueras o el debutante Alejandro Costoya, favorecía que salieran a por todas desde el primer minuto.

La intensidad de España arrolló por completo a una selección angoleña que está en los albores del balonmano, que cuenta con algunos hombres destacados, como el lanzador Ferreira o la veterania de Lopes, pero que como conjunto no tiene absolutamente nada que oponer al juego Hispano.

Para más inri, en el primer ataque, su guardameta Muachissengue sufrió un balonazo que le obligó a retirarse, y su sustituto, Figueira, que tuvo intervenciones de mérito, fue expulsado a los ocho minutos por impactar con Ángel Fernández en un contragolpe. Evidentemente esto no son excusas para el equipo angoleño, que ya perdía 9-2 en esos instantes, merced a la defensa y el contragolpe mortal de los hispanos que, una vez más, tenían en Gurbindo a su repartidor de juego ofensivo. Por si fuera poco, a los diez minutos, y vista la diferencia en el marcador, Jordi Ribera ordenó una defensa 5-1, con Ángel Fernández de avanzado y después Dujshebaev, que maniató aún más si cabe a los africanos hasta el punto de que en el ecuador de esta primera mitad ya llevaban nada menos que nueve pérdidas de balón.

Con estas premisas estaba claro que la goleada iba a ser inevitable. Precisamente la marcha de Gurbindo, que ya no volvería a tocar pista, y la entrada de Dujshebaev enmarañó el ataque español. Y del 15-7 del primer cuarto de hora se pasó a un 21-10 al término de los treinta minutos de la primera mitad.

Tras el descanso, España contemporizó con el conjunto angoleño, quizás para no hacer más sangre de la debida sobre todo después de que su guardameta Muachissengue se lesionara y no tuviera recambio, ya que el segundo portero había sido expulsado en la primera parte. Un jugador ocupó supuesto con un peto y después el guardameta volvió a incorporarse. El intercambio de goles con los angoleños se frenó bruscamente con el cambio de Ángel Fernandez por Dujshebaev. El del Naturhouse presionó y robó como avanzado y los angoleños, que habían anotado siete goles en quince minutos, tan solo sumaron tres en los quince siguientes. Al final, lo único destacable fue el debut de Alejandro Costoya y el resutaldo final de 42-22 para los Hispanos.