Vanessa Arauz, especialista en sueños y primeras veces

Con el fútbol como telón de fondo, esta ecuatoriana de 26 años nació pionera y en el Mundial femenino de Canadá 2015 se convertirá en la entrenadora más joven de la historia de cualquier competición de la FIFA.

Su historia es una historia de superación, de no hacer caso a los prejuicios y seguir hacia adelante. Sin mirar hacia atrás. Ni a los murmullos de los lados. Con la convicción de no salirse de su camino, el que nadie le recomendó y en el que nadie creyó...salvo ella misma. "Mi madre siempre decía que, cuando estaba dentro de ella, pateaba mucho, que debía estar jugando como 20 partidos de fútbol", recordaba en septiembre en una entrevista para el programa "Momentos", de EcuadorTV.

El balón le acompañaba mucho antes incluso de ver uno con sus propios ojos. Como si fuera una cosa del destino, Arauz creció obesionada con ese objeto esférico que hace feliz a cientos de millones de personas en todo el mundo. "Me entrené desde los 8 años en equipos de varones porque no existían escuelas femeninas de fútbol. En los partidos desde el graderío me gritaban que me fuera a lavar platos, que no debía estar ahí", explica, sin rencor en su tono. "Tomé el balón, desbordé a un jugador e hice el gol que nos dio la victoria".

Vanessa Arauz nunca se rindió a pesar de las faltas que le hizo la vida. Creció y fue sumando goles en todas las actividades que realizó. Fue la primera mujer en obtener el título de entrenadora en Ecuador y, también, la primera en dirigir a su combinado nacional, con un éxito sin parangón en su país. No en vano, la 'Tricolor' se estrenará en un Mundial femenino en Canadá de la mano de la entrenadora más joven de la historia. Arauz destrozó el registro anterior, en manos de la francesa Sylvie Beliveau, que dirigió a Canadá en Suecia 1995 con 31 años y 6 meses. En el fútbol masculino, Arauz superó al italiano Filipe Pascucci, que entrenó a Argentina en Italia 1934 con tan solo siete meses más que ella.

Ecuador se clasificó para el Mundial por primera vez tras eliminar en el repechaje a Trinidad y, en Canadá 2015, está encuadrado en el Grupo C junto al vigente campeón, Japón, Camerún y Suiza.

"Estamos trabajando para llegar mucho más lejos de octavos de final. Queremos traer la Copa del Mundo, que no es algo imposible", explicó hace apenas un mes. "No hay límites más allá de los que el ser humano se quiera poner". Ese es el leitmotiv de Vanessa Arauz, inconformista patológica que no acepta un no por respuesta. "Tenemos derecho a soñar con el título", dijo en una entrevista reciente a la FIFA. Parece complicado pero ¿quién se atrevería a decirle a esta especialista en sueños que se está equivocando?