El Atlético se estrella sin acierto en Butarque

Pese a ser superior al Leganés, la falta de contundencia impidió que el Atlético sumase aunque fuera un solo punto en Butarque, donde el equipo de Simeone sufrió su segunda derrota en la Liga, ya que no tuvo acierto ante la portería local, mientras que el Leganés aprovechó una de las escasas ocasiones de las que dispuso. Ya tumbó el equipo de Borja Jiménez al Barça cuando el conjunto azulgrana era primero y, tras despedir también de la Copa al líder de Segunda, el Almería, derribó a un Atlético que jugó un buen partido, pero no puso superar a un adversario que resistió gracias a su defensa y, sobre todo, a un guardameta que se hizo enorme.

Tuvo la oportunidad el Atlético de irse al descanso con el partido prácticamente sentenciado, pero la madera evitó en la primera media hora que marcasen Julián Álvarez, Griezmann y Gallagher, el portero serbio del Leganés también firmó entonces dos paradones al argentino y el francés, y en la segunda mitad su asedio ante la portería local en la recta final tampoco tuvo premio. El VAR le dio una vida al Atlético por una mano de Sergio González en el área en el minuto 87, pero Griezmann tiró muy mal con la zurda esa pena máxima y cuando ya agonizaba el encuentro volvió a surgir la figura de Dmitrovic ante Correa, que en esta ocasión no pudo rescatar a un equipo sin Sorloth.

Con el delantero noruego lesionado, el Atlético se quedó sin el potencial en el juego aéreo, del que tanto abusó en la segunda parte contra un Leganés que defendió con mucho y muy bien y logró, tras haber cedido una autopista en el primer tiempo ante Giuliano, dar una vuelta táctica en el segundo para tapar los espacios al todavía líder. Sin Sorloth, Simeone hizo debutar al goleador del filial del Atlético, Adrián Niño, pero tampoco dio resultado. No era la tarde del Atlético frente un gran Leganés que se creció con el gol de otro verdugo serbio, Nastasic, y propició nervios y precipitación en un equipo al que le faltó pegada y le sobraron los postes y Dmitrovic.

Con la fortuna de su lado en un primer período de absoluto dominio rojiblanco y buen fútbol de los colchoneros, aprovechó el Leganés al inicio del segundo una de sus principales virtudes, el balón parado, y resistió con todo para frustrar a un Atlético que iba lanzado y pinchó donde menos se esperaba, para sufrir una dolorosa derrota por no tener acierto. Ni en el área contraria, ni en la propia, donde tras un córner lanzado por Juan Cruz, sobresaliente también después como lateral izquierdo, Nastasic le ganó el salto a Pablo Barrios para obligar al Atlético a la remontada. Habituado el equipo de Simeone a ir contraremolque y dar la vuelta a los partidos en los tramos finales, esta vez se rompió la costumbre y no marcó ni de penalti.