Bale vuelve a romperse con Gales

La devoción del extremo por su combinado nacional ha vuelto a jugarle una mala pasada y provocado un profundo estupor en el Real Madrid. Pese a que la selección británica no se jugaba ya nada frente a Bélgica, puesto que tenía la repesca para el Mundial de Catar garantizada merced a su actuación en la Liga de Naciones y el triunfo de los 'diablos rojos' sobre Estonia el pasado sábado hizo imposible que lograsen el pase directo, el futbolista prefirió mantenerse concentrado con los 'dragones' en lugar de liberarse del intrascendente compromiso para regresar a la capital española, como esperaba el club.

Bale lleva sin jugar un partido con el Real Madrid desde el 28 de agosto, cuando formó en el once inicial que se midió al Betis. Posteriormente se lesionó en el calentamiento previo al choque frente al Celta que supuso el regreso del fútbol al Santiago Bernabéu y ya no volvió a vestirse de corto hasta que Rob Page, seleccionador de Gales, le citó para los últimos compromisos dentro de la fase de clasificación de Catar.

Participó en la primera parte del encuentro frente a Bielorrusia, con el que alcanzó el centenar de internacionalidades, a seis del récord con los 'dragones' que ostenta Chris Gunter, pero se retiró tocado. Una vez que los servicios médicos de su federación le han explorado se ha determinado que tiene afectado el gemelo y ahora la patata caliente es para el Real Madrid, que le paga pacientemente una ficha anual de 15 millones de euros, el salario más alto de la plantilla, pese a su continuo absentismo.

En lo que va de curso, Bale se ha perdido ya trece partidos por lesión y acumula 58 días de baja. Desde que regresó de su cesión al Tottenham, cuenta más minutos con Gales (225) que con el Real Madrid (193). Solo ha disputado tres partidos a las órdenes de Carlo Ancelotti, que ya dejó claro en la previa del partido ante el Rayo Vallecano que una cosa era tener el alta médica y otra la competitiva.

Entonces Bale dejaba atrás casi dos meses en el dique seco por un problema en los isquiotibiales de la pierna derecha. Pese a ello, el futbolista volvió a ponerse al servicio de su selección, con la que ha sufrido el enésimo percance de una carrera marcada por sus continuos problemas físicos.

Bale, que termina contrato el 30 de junio de 2022, vuelve a estar en el ojo del huracán por su decisión de forzar para jugar con Gales. El regreso al banquillo de Chamartín de Ancelotti, con el que vivió sus mejores días en el Real Madrid siendo determinante en la Copa del Rey conquistada frente al Barça en Mestalla con aquella carrera suya frente a Marc Bartra que desembocó en el gol de la victoria y también en la conquista de la décima Champions de los blancos contra el Atlético en Lisboa, le había concedido una oportunidad de despedirse del Bernabéu siendo importante. El italiano confiaba en sacar un buen rendimiento del galés y le dio las llaves de la titularidad en las tres primeras citas de la temporada, pero en el club hace tiempo que perdieron la fe y solo esperan ya que pasen los meses para ahorrarse su elevado salario.