Añón acerca al Marbella al liderato

Con tres juveniles en el banquillo por las ausencias a última hora del goleador Ferrón y el centrocampista Álex Bernal, el técnico Fernando Estévez sólo hizo un cambio respecto a los once que empataron sin goles contra Las Palmas Atlético. Puso a Otín por Sergio Narváez para ganar una profundidad por una banda que sigue huérfana sin el excelso Rioja.

Espesos, con poca continuidad y sin llegada, los blanquillos tuvieron serias dificultades en la primera parte para salvar las líneas férreas del Jumilla. Primero, por incapacidad propia; después, porque los visitantes frenaban con faltas cada escape puntual en ataque de Indiano, Añón y Corpas. El balance ofensivo del Marbella se resume en dos disparos esporádicos sin encontrar portería de Otín e Indiano. Los locales no encontraban la identidad que les permitía ganar en casa con el rodillo habitual. Mientras, los murcianos sí eran fieles a su estilo rocoso con un juego tan básico como efectivo.

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Caye Quintana, pretendido en las últimas temporadas por los costasoleños, fue un quebradero de cabeza. Presionaba la salida de los centrales y probó en dos ocasiones a Wilfred. La primera tentativa sobre el meta sevillano acabó con un disparo duro y raso desde la frontal. Más clara fue la jugada de Chupe por la derecha que finalizó Caye con un testarazo que sacó de puños el cancerbero. Sorprendía el Jumilla con su disposición seria que impedía al Marbella ser incisivo. Con todo abierto el conjunto de ‘Pato’ marcó a la salida de una falta, pero el remate de Fran Moreno fue anulado por fuera de juego en el minuto 40. Sin más ocasiones que lamentar los blanquillos se marcharon al vestuario con los deberes por hacer.

En la segunda parte el equipo parecía más engrasado. Hasta salió el sol como metáfora de un Marbella al que se le encendió la luz. Corpas empezó a pegarse a la cal de la banda derecha para desbordar, la pelota por fin pasaba por el centro con Indiano poniendo orden. El Jumilla ya no se asomaba al área y le daba la responsabilidad a los costasoleños, claros dominadores hasta el final. Con el paso de los minutos las líneas del centro del campo y el ataque se ampliaban dejando espacios mejor aprovechados por los locales. El de siempre salió al rescate. El capitán Añón inició un contragolpe con un balón largo a Corpas. El jiennense contemporizó para filtrar entre los centrales un pase al marbellí que definió con clase con la izquierda.

Desatascó el partido el Marbella, que en ocho minutos sentenció. Juanfran recogió un servicio al filo del área y con un derechazo a media altura dobló las manos de Valens para hace el 2-0 en el minutos 72. Repetían como goleadores Añón y Juanfran como en el último choque en casa contra el Granada B. Sólo había un equipo en el campo. Añón guardó todo su recital para el tramo decisivo. Estrelló una pelota en el palo izquierdo tras otra gran acción de Corpas. La gente se divertía y rompió en aplausos para recibir en el Municipal al juvenil Cristian que se pegó a la banda izquierda. Pudo marcar con un tiro cruzado, al igual que Narváez, que lo hizo todo bien desde que sustituyó a un ovacionado Añón. Y el próximo partido Marbella-Cartagena... ¡Hagan juego!