Salomón Castiel deja la secretaría general de Cultura de la Junta de Andalucía

Salomón Castiel dio el salto a la política andaluza tras las últimas elecciones autonómicas, en agosto de 2022, con el equipo del consejero Arturo Bernal. Con una macroconsejería que incluía las ramas de Cultura, Turismo y Deportes, Bernal –con una experiencia consolidada en el ámbito del turismo– optó por un perfil técnico con una amplia trayectoria en la gestión cultural y muy integrado en el sector para liderar ese campo.

De su paso por la consejería quedará una profunda reestructuración de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, con nuevos departamentos especializados por áreas y un reparto de sus sedes por las diferentes provincias. Entre ellas, por ejemplo, la del nuevo Instituto de Artes Plásticas, ubicado en Málaga y ahora en pleno proceso de elección de su director. En la presentación de las líneas estratégicas de la consejería, en noviembre de 2022, Bernal y Castiel abordaron la necesidad de reorganizar la Agencia y apostaron por escuchar al sector con la creación de un Consejo Andaluz de la Cultura, que convocará este año su primera reunión.

No obstante, la acción más visible de su mandato ha sido la celebración de los Grammy Latinos en Sevilla, con un acuerdo por tres años con la Junta que culminó con la celebración en noviembre de 2023 de la fiesta de la música latina fuera de EE UU por primera vez en su historia. Un evento que tuvo una enorme repercusión internacional.

Nacido en Casablanca, pero muy vinculado a Málaga, Salomón Castiel empezó las carreras de Ingeniería y Medicina, aunque no las terminó y se dedicó desde joven al mundo del periodismo. En 1995, con la llegada del PP al Ayuntamiento de Málaga, dejó la profesión para acceder a la gerencia del Teatro Cervantes. Durante ese tiempo, además, se convirtió en el primer director de un recién nacido Festival de Málaga.

Al frente del teatro de la ciudad y del festival estuvo hasta 2008, momento en el que renunció por motivos personales. Ese mismo año fue nombrado miembro de la Academia de las Artes y de las Ciencias Cinematográficas de España. En 2009 asumió la dirección de la Mostra de Valencia, donde estuvo hasta 2011 cuando regresó a Málaga como director general de Cultura de la Diputación. En esa institución se hizo cargo de su proyecto cultural estrella, La Térmica, un espacio cultural que lideró hasta su salto a la política andaluza.