Los nominados a los Goya no acudirán a la gala por el cierre de Málaga por la pandemia

La incertidumbre es lo que vuelve a imperar en este momento en el que el país pasa por la tercera ola de la Covid-19, por lo que Antonio Banderas, director y presentador de la gala de los Goya junto a la periodista María Casado, ha abogado por «ser realistas y vamos a hacer una gala híbrida, con directos y telemática». «Hay que cumplir todos los protocolos y esto lanza un mensaje a todos los colectivos: esto es una lucha mundial. La pandemia se ha recrudecido y ahora estamos en un momento álgido, no sabemos cómo se llegará al 6 de marzo», ha afirmado el actor malagueño que como también ha señalado el director de la Academia, Mariano Barroso, ha defendido la celebración de la entrega de premios como reconocimiento al cine y a todos los que han estrenado películas en este año tan difícil.

La iniciativa de realizar una gala sin la presencia de los candidatos ha partido del propio Antonio Banderas que se ha reunido esta misma mañana con la Junta Directiva de la Academia de Cine para explicarles la situación actual en Málaga y proponerles esta medida ante el recrudecimiento de la pandemia. «Para mí, era importante venir a Madrid hoy para comunicarme con mis compañeros y pedirles ayuda y comprensión a la hora de atacar esta gala y me la han dado», ha comentado el actor y presentador, cuya decisión ha sido respaldada por «unanimidad» por todo el órgano de dirección de la institución cinematográfica, según ha añadido el propio Mariano Barroso.

De hecho, el presidente de la Academia ha asegurado que, ante la situación sanitaria solo cabe ser «excepcionalmente responsables y cuidadosos» y ha aclarado que, como las medidas van cambiando cada jornada por la incidencia de la pandemia, el actual diseño de la gala es válido «a día de hoy», por lo que podría cambiar. De hecho, Antonio Banderas ha afirmado que no le «gusta la palabra improvisación», por lo que ha preferido hablar de «adaptación» a la inquieta realidad. Así, ha confesado que no esperaban que la situación actual fuera tan complicada desde el punto de vista sanitario. «La sensación en el verano es que se iba a disipar, pero no ha sido así y no sabemos cómo vamos a llegar al 6 de marzo», ha dicho el presentador que ha añadido que la gala se podrá hacer «siempre que respetemos los protocolos de seguridad».

Con estos condicionantes, la 35 ceremonia de entrega de los premios Goya será «elegante y sobria como Antonio quería desde el principio», ha señalado la copresentadora María Casado, que ha añadido que se mantendrá el espectáculo televisivo que será emitido por TVE-1. Otra de las cuestiones sobre la mesa es la hora de celebración y retransmisión en directo, ya que probablemente existirá un toque de queda a las 22 horas o, si la situación empeora, incluso antes. Así, los organizadores han declarado estar «negociando» con las autoridades la concesión de un permiso para su terminación más allá de ese límite.

El propio Antonio Banderas ha dicho que estos 35 premios Goya se recordarán como los del «año de la Covid» y esas circunstancias los hacen «especiales». Y para empezar el actor ha anunciado una gala más corta de lo habitual -el metraje de la gala siempre se critica por sus excesos-, de «algo más de dos horas» y con la presencia sobre el escenario de todos aquellos que son necesarios para el espectáculo televisivo. Comenzando por los conductores de la gala y también los presentadores que anunciarán cada uno de los ganadores, los cuales verán ese momento desde sus casas o desde las oficinas de las productoras en caso de que éstas decidan reunir a todos sus nominados para ver juntos el resultado de los premios.

La galardonada que sí estará en Málaga será Ángela Molina, Goya de Honor de la presente edición que recogerá en el Teatro del Soho Caixabank el reconocimiento a su carrera. Ella también pasará por una alfombra roja muy restringida y solo para la prensa acreditada a la que solo acudirán los rostros encargados de anunciar los ganadores. Si bien el humor no estará tan presente como en otros años, lo que no faltará serán las actuaciones en directo con la presencia de Vanesa Martín y Aitana, además de la recién creada Orquesta Sinfónica del Teatro del Soho, que dirige Arturo Díez Boscovich.

A la próxima gala de los Goya aspiran varios nominados malagueños, como la actriz Kiti Mánver (mejor actriz por su papel de vieja tierna y cascarrabias en 'El inconveniente'), la joven guionista Marina Parés (aspirante al argumento adaptado por 'Ane') y el director José Antonio Hergueta (candidato al corto documental por 'Paraíso en llamas'), que finalmente verán desde sus casas estos premios. Este último le ha puesto algo de humor a la noticia de que su primera candidatura será finalmente telemática y ha preguntado por redes sociales si podía asistir «en bata, pijama y zapatillas».

La propia gala ha tenido tanto protagonismo por su excepcionalidad, que en la rueda de prensa no ha habido tiempo ni para hablar de las películas nominadas. Así 'Adú', de Salvador Calvo, que cuenta la odisea de un niño africano por llegar a España, cuenta con el mayor número de nominaciones, 13, seguido por las nueve nominaciones de la ópera prima de Pilar Palomero, 'Las niñas', y de la cinta de Pablo Agüero 'Akelarre' (aunque esta última no aspira a mejor película). A lo que sí se ha referido Antonio Banderas es al homenaje al director valenciano Luis García Berlanga, al que se homenajeará en la gala de los Goya al cumplirse el centenario de su nacimiento.

El director y presentador de la gala ha dicho que no «empujará» para que la gala sea «emotiva», porque por las propias condiciones de este año lo va a ser. Además, ha señalado que también recordará a los compañeros, muchos de ellos desconocidos, que también se han ido por la pandemia y se ha despedido con un deseo: «Me encantaría que la gala de los Goya sea el pistoletazo de salida, no solo de la recuperación del cine español, sino de la humanidad, porque estamos todos agotados y necesitamos darnos besos y abrazos».