La Dani: «Ser de Málaga es algo que me enorgullece, pero no me considero un icono de la ciudad»

–¿Por qué La Dani?

–Yo antes de ser cantante trabajaba en una tienda de ropa y mis compañeras me decían 'La Dani'. Cuando empezamos Guille Retro y yo pensamos nombres para mí, pero me parecía absurdo ponerme otro nombre que no fuese el mío.

–¿Prefiere que se refieran a usted en femenino o en masculino?

–Es complicado y a la vez es sencillo de entender. Mi entorno y mis amigos se dirigen a mí tanto de las dos formas y todo está bien. Si a lo mejor una persona fuera de mi entorno o fuera del colectivo LGTB me habla en femenino, dependiendo del contexto, puede ser un poco raro porque no sé muy bien cuál puede ser su intención. Aunque yo le hablo en femenino a todo el mundo, independientemente de su género o su identidad, no tengo masculinidad fragil ni nada por el estilo. Esto depende mucho de quién y cómo se dirijan a ti.

–¿Qué quería ser cuando era pequeño?

–Creo que cuando era pequeño quería ser lo que soy ahora mismo. Me gustaría dedicarme sólo y exclusivamente a la música, eso por su puesto. Trabajo de lunes a sábado en una tienda de ropa, pero no me puedo quejar sobre cómo me va o a lo que me dedico.

–¿Su lugar favorito de Málaga?

–Siempre he tenido dos sitios favoritos de Málaga, pero ya no existen. Antes de que se construyera el Muelle Uno había una escalerita que iba al mar y me encantaba, además del Balneario. Aunque hace mucho que no voy, creo que han tirado todo el muro y ya aquella playa no es tan íntima como era antes. Eso y mi barrio, calle la Victoria.

–Es un cocinero experto por Instagram. De sus recetas veganas, ¿cuál es la mejor?

–(Risas). Podríamos decir que el bizcocho es vegano, así que elijo mi 'tres, dos, uno'.

–Un consejo para pasar menos calor en verano para los que no tengan aire acondicionado en casa.

–Pues pasarse todo el día en braguitas, las ventanas abiertas de par en par. Un heladito, un abanico, agua fresquita... Todo eso ayuda.

–¿Granizada de limón o de café?

–De limón.

–Si tuviera que elegir algún superpoder para salvar el mundo ahora mismo, ¿cuál escogería?

–Cogería una varita y a todo aquel que no respeta, que no es tolerante y que son unos amargados los convertiría en gente amable y empática.

–¿Una frase que le defina y le inspire?

–Esta frase no es mía, es de Almódovar, pero me representa: 'Una es más auténtica cuanto más se parece a lo que ha soñado de sí misma'.

–¿Cree que ha compuesto su próximo hit durante los últimos meses?

–Sí, hace tiempo dije que me retiraba momentáneamente, no para hacerme la guay ni la interesante, pero llevaba dos años cantando lo mismo y quería algo nuevo. No quería cansar a la gente o al público, quería preparar algo guay. Llevo un año con esto y la cuarentena me ha ayudado a tener más tiempo y a unirme con un colega, que hemos casado muy bien, por cierto, con el que ha sido muy fácil terminar el proyecto. Me he basado en cosas explícitas, quería hacer algo que me representara a mí y a mucha gente, no sólo que estuviese dirigido a un público LGTB. Es algo para todo el mundo con lo que cualquiera puede identificarse.

–Si se pudiera viajar este año con mucha ligereza: ¿a dónde iría de vacaciones?

–Yo me iría a Málaga ahora en agosto, pero siempre he tenido muchas ganas de ir a México o a Chile.

–¿Con qué personaje famoso, vivo o muerto, pasaría un día entero?

–Con Bibiana Fernández.

–¿Qué prenda de ropa o accesorio no se pondría nunca para salir a la calle?

–Unas sandalias, las odio.

–¿Piensa en la muerte?

–No, no mucho. No me quiero morir, tengo muchas ganas de vivir y hacer cosas, pero creo que una vez que estás muerto no tienes conciencia y te va a dar igual. Lo lamenta la gente que se queda y es una pena, pero hay culturas que llevan la muerte mucho mejor que la nuestra. Creo también que tengo este pensamiento porque nunca he vivido de cerca una muerte trágica, no pienso mucho en ella.

–¿Algo que ver en Netflix este verano?

–Recomiendo una película que se llama 'Disclosure: trans lives on screen'. Esto es lo último que he visto y creo que debería verlo todo el mundo para que la gente sea consciente de cómo nos educan para odiar las cosas, en televisión y en cine, y así empezar a reconstruirse y educarse. Aprender a ser mejores y más tolerantes.

–¿Toca algún instrumento? Y si no.. ¿cuál le gustaría aprender?

–Me gustaría aprender a tocar la guitarra y el piano, son instrumentos que te ayudan mucho a componer y a crear sin necesidad de tener una base, que es como yo suelo componer.

–¿Se considera un icono malagueño?

–(Risas) No, en absoluto. No soy más de Málaga que cualquier otro. Soy cero patriota, aunque me encanta mi ciudad, es una cosa que uno no decide. Ser de Málaga es algo que me enorgullece, pero no me considero un icono de la ciudad.

–¿Reggeaton o trap?

–Reggaeton

–¿Un lugar al que nunca iría en verano?

–Nunca iría a Madrid, aunque vivo aquí ahora porque no me queda otra. Lo cierto es que me gusta mucho el verano en Madrid, es divertido y no hay mucha gente, pero este año en concreto no me quedaría aquí. Las piscinas están cerradas y no hay fiestas, está siendo un poco coñazo.